Los temores sobre la posible desaparición de las líneas regionales o de ancho convencional que son deficitarias mantienen en alerta a los sindicatos ferroviarios. Y como la información es escasa por parte de Renfe Operadora, cualquier medida o fallo técnico en la venta de billetes acaba con el grito en el cielo y los fantasmas rondando por las vías de ancho ibérico. Así podría resumirse lo que ha ocurrido en los últimos días con la línea Barcelona-Zaragoza-Madrid que en Aragón da servicio al corredor de Caspe con la estación de Delicias. El tren que coloquialmente se conoce en el sector como el perroflauta, porque hace el mismo recorrido que el AVE más utilizado de España a un precio muy inferior. Y que, aseguran, usan solo «los mochileros y los usuarios del Interrail».

La única alternativa barata a la alta velocidad entre Zaragoza y Madrid merecía la pena salvarla, aunque el trayecto dure casi cinco veces más tiempo que el AVE. Porque se entiende que este servicio, aunque se plante en la capital de España en solo hora y media, sigue siendo un medio de transporte «elitista» al que no todo el mundo puede acceder. Y, en el caso de Aragón, la línea de ancho convencional, permite a los caspolinos moverse hasta Delicias todos los días, aunque sea con una única frecuencia diaria.

No habrá «cortejo fúnebre»

En esta ocasión fue CGT el sindicato que alzó la voz públicamente. Alertó de que la compañía había dejado de vender billetes por internet, que más allá del día 2 de diciembre no se podían adquirir y que en los planes de la empresa estaba hacerlo desaparecer «el día 10». Para siempre, sin vuelta atrás y como víctima de la rentabilidad económica que a veces ha perseguido a las líneas de tren deficitarias.

Así que para intentar evitarlo plantearon una protesta en Madrid, en la estación de Chamartín, para el próximo día 1. «Se realizará un cortejo fúnebre, por lo que se sugiere asistir con ropa oscura y complementos relacionados. El 10 de diciembre tendrá lugar el último servicio de los trenes regionales que unen Madrid-Zaragoza-Barcelona pasando entre medias por otras tantas decenas de pueblo más que se quedarán sin servicio de tren». Así rezaba su invitación a todo el que se quisiera sumar a la causa. Y, entre tanto, Renfe recibía llamadas preguntando si ese era su plan con esta línea.

Lo cierto es que la operadora desmentía ayer mismo esta información. «Quizá ha podido haber algún fallo técnico a la hora de poder comprar billetes, pero si ocurrió ya está subsanado y si se siguen vendiendo es porque no se va a quitar», explicaban ayer las fuentes oficiales.

Lo cierto es que la web de Renfe sigue dando problemas para obtener billetes, pero si se quiere comprar uno para viajar a Madrid todavía se puede. Al menos hasta el día 31 de diciembre. ¿Qué pasará el 1 de enero? No se sabe todavía. Una página web que tampoco deja comprar billete de ida y vuelta. El servicio «no está disponible», explica el portal de compras ferroviario.

CGT aclaró lo sucedido. Sus portavoces en Aragón explicaban que había sido un malentendido y que el cortejo fúnebre se desconvocaba. Pero que nadie garantiza la continuidad de esta línea, «ahora que Fomento quiere negociar las que son de obligación de servicio público».