El albergue de Calcena se encuentra en la actualidad cerrado y está a expensas de que se lleve a cabo una inversión de cerca de 40.000 euros para que pueda volver a la actividad. El alcalde de la localidad, Mariano Miguel, señaló que se está trabajando «intensamente» para que el albergue vuelva a estar funcionando «cuanto antes». Algunas de las instalaciones estaban en condiciones deficientes y es necesaria una reforma para acondicionarlas.

Mejor le ha ido al albergue de Gotor, que abrió sus instalaciones esta semana después de cuatro meses cerrado. La hospedería está dentro del convento de los Dominicos, que fue restaurado, y cuenta con una capacidad de 28 camas y un comedor.