Aragón se incorporará antes del verano al sistema de receta electrónica interoperable, lo que permitirá a los pacientes adquirir en otra comunidad un medicamento prescrito aquí y, del mismo modo, retirar en Aragón un fármaco dispensado fuera. Según indicaron fuentes del Departamento de Sanidad, la previsión es que la incorporación se materialice «en abril o mayo». De este modo, Aragón ultima su adhesión definitiva a la lista de comunidades donde el sistema ya se encuentra instaurado y en el que figuran Galicia, Canarias, Extremadura, Navarra y Comunidad Valenciana. Castilla La Mancha, por su parte, está actualmente certificada como prescriptora (se puede retirar en otra comunidad un fármaco recetado en la manchega), mientras que su adhesión como dispensadora (vender medicamentos recetados en otras comunidades) se prevé para este mismo mes de marzo. Aragón se incorporará de forma inminente y Asturias, Castilla y León, La Rioja y Murcia se encuentran en fase muy avanzada y se espera que sean las siguientes comunidades en llevarlo a cabo.
Porque la incorporación al proyecto se ha realizado por fases, en las que se van sumando las diferentes comunidades autónomas como emisoras, dispensadoras o ambas cosas. Así, el proyecto tiene como objetivo principal permitir la dispensación desde cualquier farmacia, por medios electrónicos, de la medicación prescrita en otra comunidad autónoma sin necesidad de presentar una receta en papel.
MOVILIDAD
«La movilidad de los ciudadanos en todo el territorio nacional hace necesaria la implantación de un sistema que permita intercambiar la información contenida en una receta entre comunidades autónomas. Esta necesidad es la base de la interoperabilidad de la receta electrónica, que garantiza la circulación de la información para asegurar la prestación farmacéutica en el conjunto del Sistema Nacional de Salud», subrayaron desde la Administración sanitaria.
La novedad en el sistema de dispensación era esperada por los farmacéuticos desde hace tiempo. «Ya era hora. La receta electrónica es una herramienta fantástica tanto para el paciente como para el sistema sanitario, pero resulta extraño que 17 comunidades autónomas no estén comunicadas entre sí», destaca Ramón Jordán, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza, que expone, en este sentido, que «el sistema habría sido más interesante al revés, es decir, configurar una receta electrónica en todo el ámbito nacional y no 17 para posteriormente conectarlas entre sí».
En todo caso, la inminente puesta en marcha del novedoso sistema será «tremendamente importante» para el paciente poque «va a poder viajar y retirar cualquier medicación con su tarjeta sanitaria sin necesidad de acudir a la suya de origen para adquirir la documentación necesaria para que en otra comunidad se la puedan dispensar», explica Jordán.
FORMACIÓN
Del mismo modo, los farmacéuticos podrán dar la medicación prescrita por un médico de otra comunidad, que será la que asumirá el coste del producto.
Todos los boticarios aragoneses recibirán formación en interoperabilidad a partir de la próxima semana, cuando empezarán los farmacéuticos de Zaragoza. «No es difícil. Lo complicado fue cuando empezamos porque todo era nuevo, pero ahora solo se trata de pequeñas variaciones», indica Jordán.
La receta electrónica se implantó en la totalidad del territorio aragonés a finales del 2013, casi dos años después de su puesta en marcha.
