Hace ya 15 años que los quintos no tienen que verse en la testitura de ser llamados a filas para cumplir con el servicio militar obligatorio (o la prestación social sustitutoria), y hace mucho más, 42, que ya no hay posibilidad de que les tocase servir en el llamado Sáhara español. Pero ambas realidades pueden recordarse este mes, hasta el próximo día 22, con sendas exposiciones gratuitas en el palacio de la antigua Capitanía de la plaza Aragón de Zaragoza.

El servicio militar obligatorio data de antiguo, pero la muestra que se puede visitar en Capitanía se ciñe a la época entre 1940, cuando se estableció la ley sobre el particular -que, por ejemplo, eliminaba la posibilidad de librarse pagando- hasta el 2001, cuando definitivamente se suspendió el servicio en favor de un Ejército completamente profesional.

La muestra se nutre del material acumulado por los coleccionistas Francisco Burgos, Javier Novella y Antonio Gayúbar, con la colaboración del Regimiento de Caballería España 11, la asociación Retógenes y la base San Jorge. A través de una cuarentena de maniquís se puede repasar la evolución de los uniformes, desde prácticamente milicias a los que anticipaban ya los del Ejército moderno. Así como reproducciones de los rifles Mauser y los fusiles Cetme utilizados en el adiestramiento.

Lo más llamativo son las reproducciones de los distintos momentos hasta hace nada habituales -desde el sorteo de destinos hasta la vida cuartelaria-, y el sinfín de recuerdos, postales e imágenes que los coleccionistas han acumulado a lo largo de las décadas.

En el desierto

Si duro podía resultar para muchos jóvenes que nunca habían salido de casa, ir destinado lejos a cumplir el servicio, cabe imaginar lo que podía suponer que le tocase el Sáhara español, no solo por la distancia y el clima sino por las duras condiciones de vida que debían compartir con la población local.

Con la perspectiva del tiempo, sin embargo, la Asociación Nacional de Veteranos de la Mili en el Sáhara ha recopilado un inagotable fondo fotográfico (33.433 imágenes) y una buena colección de objetos que también pueden verse en el palacio de Capitanía, incluida la vestimenta más habitual de la zona.

Ambas muestras son de acceso gratuito y pueden visitarse todos los días de 18.00 a 21.00 horas, y los fines de semana y festivos también de 11.00 a 14.00 horas, con la colaboración de la Academia General Militar.