Alberto Garzón destacó, sobre el resultado del referéndum griego, que ese no "claro y rotundo" dado por la población significa una "apuesta por cambiar el rumbo suicida de la austeridad" y debería hacer que los dirigentes de la Eurocámara se replantearan la política económica, para estar "a la altura de las circunstancias y dejen de machacar al pueblo griego". "Porque no se puede construir una comunidad política en contra de la gente", argumentó el líder de IU.