La asamblea general ordinaria de Riegos del Alto Aragón celebrada ayer lamentó «la baja regulación del río Gállego» y la forma que afecta tanto en los episodios de sequía de los meses precedentes como en el actual incremento del caudal a consecuencia de las fuertes lluvias de los últimos días.

En la reunión hicieron hincapié en la situación de las reservas y lamentaron los 435 hectómetros cúbicos vertidos en las últimas jornadas por los ríos Cinca, Sotón y Gállego, sobre todo por la falta de infraestructuras de contención en este último. De hecho, ayer fue necesario cortar un camino en su desembocadura por inundación.

El presidente de esta comunidad, César Trillo, informó de las aportaciones de los regantes al debate del Pacto Nacional del Agua, en el que se consideran «de vital importancia» todas las cuestiones relacionadas con la financiación de las confederaciones hidrográficas, organismos que para este sector son el «elemento vertebrador y garante de la unidad de gestión del recurso».

También se dio cuenta de la marcha de las obras del embalse de Almudévar, una cuestión que en estos momentos está envuelta en un proceso judicial.

Asimismo se trató la situación del parque eólico del Balsón (en Gurrea de Gállego) que ejecuta la sociedad Promoción de Energías Renovables de las Comunidades de Regantes de Aragón (Percra) y en la que cuentan con una participación del 99 %. Trillo anunció que han comenzado los análisis del terreno para la cimentación de los aerogeneradores y que va a empezar la construcción de los mismos para cumplir «de forma escrupulosa» en plan de obras que se ha planteado.