Las Cortes de Aragón reprobaron ayer al ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, por su «falta de respeto e insulto a la dignidad de los aragoneses» al haber autorizado el recurso de reposición contra la entrega de los bienes del monasterio de Villanueva de Sijena, en el que se pide su nueva devolución al museo de Lérida.
La iniciativa, presentada por el PSOE, contó con el rechazo del PP y la abstención del Ciudadanos, pero con el apoyo de Podemos, CHA, IU y PAR.
En un debate plagado de reproches cruzados, según enfatizó el popular Antonio Torres, el diputado socialista Darío Villagrasa justificó la iniciativa en lo que desde el PSOE autonómico consideran un «claro posicionamiento» del ministro en contra de los intereses de Aragón.
Por eso, la reprobación pretende ser un «toque de atención» a su conducta después de que avalara el recurso de interposición para el retorno de los bienes a Sijena, una vez fueron estos devueltos a principios de diciembre al cenobio oscense.
Para Torres, la aprobación de esta iniciativa supone que la Cámara aragonesa queda «desautorizada» para hablar de unidad en relación con los conflictos sobre el arte sacro y criticó duramente al PSOE por «empeñarse en emponzoñar el debate» sobre las piezas religiosas.
En línea parecida, la portavoz de Ciudadanos, Susana Gaspar, lamentó el intento de «politizar» los diversos avances judiciales, porque cuando esto no sucede y sí que se siguen los trámites adecuados, es cuando, en su opinión «se consiguen las cosas».
La diputada Amparo Bella, de Podemos, calificó la iniciativa de oportuna, pero reclamó más valentía a los diputados de izquierdas para pedir únicamente la reprobación, sino «la dimisión» del ministro. Por su parte, el PAR apoyó con poco entusiasmo la iniciativa, al considerar, según dijo la diputada María Herrero que es «fea» y que busca «romper la unidad».
