La Guardia Civil de montaña rescató entre el jueves y el viernes a cuatro excursionistas, dos de ellos con síntomas leves de congelación en las manos, en dos acciones diferentes. Dos de los senderistas se perdieron en la zona de Perarrúa, cerca de Benasque, mientras que los otros dos montañeros fueron víctimas del frío intenso cuando se hallaban en el refugio Ángel Orús, en Sahún.