Dos jóvenes de 29 y 19 años fueron rescatados anoche in extremis tras quedar inconscientes en el interior del número 50 de la calle Gaspar Torrente de Santa Isabel por una intoxicación de monóxido de carbono debido, según confirmaron los bomberos, a una mala combustión de la caldera de la casa. Fue una vecina la que se percató del fuerte olor a gas que salía del adosado y llamó a la policía y a los bomberos. Según la Policía Nacional, «una persona comprobó, a través de una ventana, que una joven se arrastraba por el suelo buscando la salida. Esa misma persona sacó a la joven». En cuanto al segundo joven, anoche no estaba claro lo ocurrido, ya que mientras unos señalaban que eran los bomberos quienes se encargaron de tirar la puerta y entrar, otros afirmaban que fueron agentes de la policía quienes sacaron al joven. Sea como fuese, la pareja de jóvenes fue trasladada a un centro hospitalario por ambulancias del 061. Anoche, las mismas fuentes confirmaron que su vida no corría peligro.

Los bomberos que acudieron al lugar de los hechos realizaron mediciones de gas en el interior de la casa y comprobaron que los niveles de monóxido eran altísimos. Una vez controlada la situación no hubo que desalojar a ningún otro vecino de sus casas. El monóxido de carbono es un gas difícil de detectar, cuyas intoxicaciones pueden llevar incluso a la muerte.