La mitad del parque Tío Jorge está sin luz, desde ayer por la tarde, por el robo del cable de toma de tierra de las farolas, según anunció el propio Ayuntamiento de Zaragoza. Esta toma deja desprovista de las medidas de seguridad necesarias y obligatorias a la instalación por lo que, aunque las farolas funcionan, se deben mantener apagadas.

Los técnicos municipales estuvieron trabajando para solucionar el problema y consiguieron resolverlo en la mitad del parque, ya que la instalación depende de dos centros de mando distintos. Así, por la noche una parte de la zona verde lucía, mientras que la otra permanecía apagada por seguridad.

Según el consistorio, los técnicos de Infraestructuras denunciaron el robo del cable ante la Policía, tal y como se hace cuando se altera el estado de las instalaciones municipales.

El cable robado en el parque afectaba a toda su extensión. Los técnicos estuvieron evaluando por la tarde tanto la cantidad del material robado como la fórmula para reponerlo con las mayores medidas de seguridad.

La concejala de Infraestructuras, Lola Campos, dio orden de reposición del cable para poder garantizar el alumbrado público en el parque en condiciones de seguridad, a la vez que para permitir el desarrollo de las actividades de la Cincomarzada.

"Este tipo de actos vandálicos compromete las infraestructuras municipales, perjudica a todos los ciudadanos y nos obliga a un fuerte esfuerzo presupuestario en tiempos de dificultades", dijo Campos, quien explicó que en los últimos años se han sufrido múltiples robos de cobre en las instalaciones del alumbrado público, que han afectado tanto a zonas de la periferia y a parques como a calles de distintos barrios.

Infraestructuras trata de que las reposiciones sean lo más inmediatas posibles, aunque reconoce que son robos que dañan de manera muy notable las instalaciones. Fuentes municipales afirmaron que el cable se arranca desde un extremo de las cajas de registro y acaba afectando a varias líneas de luminarias.

Óscar Ruiz, trabajador del quiosco del parque, afirmó que sería "una faena" quedarse sin luz. "Si ya de normal la gente se queja de que el parque está muy poco iluminado... si no hay alumbrado los vecinos no pasarán por aquí", lamentó el hostelero.

El consistorio informó de que una situación similar se registró también en el parque José Antonio Labordeta, que propició que tuvieran que apagar también la mitad del alumbrado de la superficie verde.