La presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, afirmó ayer que la diferencia entre la izquierda y la derecha también se aprecia en materia fiscal y presumió de no haber subido los impuestos en los cuatro años de mandato y de haber aliviado la presión fiscal a los aragoneses. Lanzó este mensaje en su intervención en un foro sobre impuestos junto al ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, durante la segunda jornada de la Convención Nacional que celebra el PP durante el fin de semana.

La dirigente aragonesa señaló que el PP es el único partido que combina "ideología y realidad", es decir, aplicar sus valores y principios, y conseguir el equilibrio entre ingresos y gastos, frente a los socialistas, a los que acusó de cambiar "los argumentos de la socialdemocracia tradicional por el populismo". A su juicio, en materia de política fiscal y tributaria, las comunidades autónomas deben "trasladar el prestigio, la credibilidad, el rigor, la solvencia de la región fuera de sus propias fronteras".

También tienen que facilitar aquellas iniciativas empresariales que quieran invertir en el territorio eliminando trabas burocráticas y, por último, "medidas de microeconomía", a través de deducciones, bonificaciones, o reducciones de tipos de interés en el tramo autonómico, entre otras acciones.

En su caso, mencionó la supresión de determinados impuestos, como el que afectaba a las estaciones de esquí por la actividad de sus telesillas, la aplicación de deducciones fiscales autonómicas para las empresas que invierten en I+D+i o para la adquisición de inmuebles para el inicio de una actividad económica o bonificaciones para la compra en viviendas en zonas rurales.

También subrayó las deducciones para la compra de material escolar, para familias con miembros con discapacidad, para las personas mayores de 70 años o para el pago de guarderías infantiles. Y la rebaja del tramo autonómico del Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF), una reforma que aplicará rebajas del tipo de interés que van desde el 17 % a aquellas personas con bases imponibles que llegan a los 12.000 euros o rebajas del 2 % para los que tienen rentas superiores a los 60.000 euros. Según Rudi, así se logrará que "la carga fiscal sea menor para las rentas más bajas y, de manera progresiva aumente para las rentas más altas, en paralelo con la propuesta aprobada por el Ministerio de Hacienda para el 2015".

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