De sentirse amortizada hace tan solo unos días, retirarse de cualquier aspiración de Gobierno y anunciar su inminente prejubilación con residencia en Madrid, a dar marcha atrás y lanzar un mensaje bien distinto. La presidenta del PP aragonés, Luisa Fernanda Rudi, ya no descarta gobernar en minoría y así lo anunció ayer tras la conclusión de la reunión de la junta directiva regional que celebró su partido en Zaragoza. Aun sabiendo que sus posibilidades de seguir al frente de la DGA son escasas, porque requeriría el desacuerdo entre las fuerzas de la izquierda y la abstención del PSOE para su investidura en una segunda votación.
Ante la demora en los pactos de izquierda, tanto para el Gobierno de Aragón como el incierto escenario que se ha abierto en Zaragoza y el nulo entendimiento entre Zaragoza en Común y el PSOE, Rudi ayer se reivindicó y lanzó un órdago y una advertencia a la izquierda al no descartar la opción de formar un gobierno conservador en minoría, dando marcha atrás a sus contundentes declaraciones de la noche electoral en la que ante la evidencia de la aritmética y la imposibilidad de sumar mayoría conservadora. "Si estos partidos no son capaces de presentar un proyecto para Aragón, el PP está en condiciones de asumir un gobierno en minoría. Eso sí, no entraremos en ninguna operación donde el PP no encabece el gobierno ni facilitaremos nada que no sea con el PP a la cabeza", explicó Rudi.
INTERESES PARTIDISTAS
La presidenta del PP autonómico tildó de "poco responsables" al presidente del PSOE en Aragón, Javier Lambán, y al líder regional de Podemos, Pablo Echenique, porque a la hora de negociar el Gobierno "se están anteponiendo los intereses partidistas", dijo.
"Es una falta de respeto a la ciudadanía y también de seriedad. No se puede salir un día diciendo que hay buena sintonía y al otro hablar de repetir unas elecciones", señaló, al tiempo que apuntó que doce días después de las elecciones solo ha visto en el PSOE y en Podemos "personalismos y obviedades".
La opción de poder continuar al frente del Gobierno de Aragón no fue su único anuncio. Rudi también repitió la posibilidad de que sea senadora autonómica --"probablemente sea así", matizó-- si no es presidenta de Aragón, pero eso no implicaría directamente su renuncia a participar en la política activa en Zaragoza desde la oposición en las Cortes de Aragón.
"De mi boca no ha salido decir que me iba. Hay que adaptarse, pero no soy mujer de abandonar y sigo con las mismas ganas de siempre. Voy a seguir al frente del PP en Aragón hasta que mis compañeros crean que soy útil y, tanto en las tres juntas directivas como en la junta regional de esta tarde --por ayer-- me han demostrado su apoyo", comentó la presidenta. "Mi sucesión no está abierta de momento", añadió.
En cualquier caso, Rudi sí descartó la posibilidad de ocupar en Madrid una cartera ministerial en el Gobierno de España. "No me veo en un ministerio en absoluto", aseveró.
La presidenta del PP aragonés, quien reiteró una vez más que su lista obtuvo más votos que ninguna otra en las pasadas elecciones autonómicas, reconoció que su partido "necesita un rearme ideológico" porque "el armazón no se ha defendido con suficiente fuerza", sentenció Rudi.
