El consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, reconoció ayer en las Cortes que en los hospitales periféricos de la comunidad hay un importante problema de falta de facultativos por plazas que existen pero que no son cubiertas, y dijo que prepara un plan de recursos humanos para corregir esta deficiencia.

Los problemas afectarían, principalmente, a los centros hospitalarios de Teruel, Calatayud, Barbastro y Jaca y a las especialidades de Traumatología, en la que se buscarían 15 traumatólogos y en Radiología, donde se carece de 19 profesionales.

Celaya anunció que va a abrir una mesa de diálogo con los sindicatos sanitarios para buscar fórmulas que palíen esta carencia y que puedan incluir medidas de incentivación a los profesionales para que acepten desplazarse a estos hospitales.

El nuevo plan de recursos humanos, además, analizará la posibilidad de aplazar la edad de jubilación de los especialistas que voluntariamente acepten hacerlo, y se estudiará la posibilidad de hacer nuevas contrataciones en los hospitales Clínico o Miguel Servet de Zaragoza en tanto en cuanto haya plazas vacantes de esas especialidades en los hospitales de la periferia.

El diputado de Ciudadanos, Jesús Juste, se interesó, en este sentido, por cómo se va a garantizar la realización de pruebas diagnósticas.

Celaya achacó a la falta de inversión en equipos diagnósticos durante los años de crisis estos retrasos, pero también a la falta de profesionales, ya que sobre 139 radiólogos en plantilla en la comunidad, 17 están sin cubrir a pesar de haberse ofertado.

Para solucionarlo, añadió, se está ampliando el horario de las pruebas diagnósticas en los sectores I y II, donde se trabaja hasta las 12 de la noche; se están priorizando las inversiones más urgentes en tecnología de radiodiagnóstico, y se va a implantar el anillo digital, para conectar entre sí todos los aparatos.

Por su parte, la diputada de IU Patricia Luquin se interesó por la falta de traumatólogos en el Ernest Lluch de Calatayud, donde solo trabajan tres médicos de esta especialidad, lo que obliga a derivar pacientes a Zaragoza.

Celaya explicó que además de la "búsqueda activa" de especialistas y del traslado de algunos pacientes a Zaragoza, se ha previsto que un grupo de facultativos del Clínico viajen semanalmente a Calatayud para actividades en quirófano y dos médicos del Royo Villanova también acuden semanalmente, de forma voluntaria, a este centro.