Sanidad indemnizará a un menor que perdió un testículo

Según informó la Asociación del Defensor del Paciente, representada en Zaragoza por el letrado Ricardo Agóiz, el paciente acudió en febrero del 2016 al servicio de Urgencias del hospital Miguel Servet, en la capital, con un dolor en la ingle e inflamación de su testículo izquierdo. A pesar de los síntomas mostrados, los responsables sanitarios no realizaron ninguna prueba ecográfica o analítica y se limitaron a realizar una palpación y a prescribir un tratamiento antibiótico frente a lo que consideraron una «simple infección».

Cuatro días después, el menor acudió a su médico de cabecera, quien le derivó de nuevo al servicio de Urgencias, donde finalmente le fueron realizadas al paciente pruebas de ecografía y analíticas que evidenciaron en el menor una torsión testicular izquierda. Debido al tiempo transcurrido, la torsión ya no pudo ser tratada por los especialistas ya que debió de ser intervenida quirúrgicamente en un plazo máximo de 6 a 8 horas después del inicio de los síntomas.

Así, el letrado Ricardo Agóiz presentó una reclamación de responsabilidad patrimonial ante el Servicio Aragonés de Salud por la pérdida del joven de su testículo izquierdo debido a la pérdida de oportunidad en el tratamiento médico que hubiera podido salvar el testículo. Es decir, el letrado entendía que una intervención a tiempo habría impedido la extirpación.

Tras el proceso administrativo pertinente, la resolución llegó el pasado verano. En julio, el consejero de Sanidad de Aragón, Sebastián Celaya, decidió indemnizar al menor con 38.899 euros tras entender, en la resolución firmada, que existió una «relación de causalidad» entre el funcionamiento de las Urgencias sanitarias y la pérdida del testículo. En este sentido, la resolución hace especial incidencia en la falta de una exploración completa del menor en el primer día que acudió al servicio de urgencias del Servet.