La consejería de Educación dejará a 15 pueblos de Huesca y Teruel sin aula de Secundaria. A partir de septiembre los jóvenes de estos municipios tendrán que desplazarse hasta institutos de localidades de mayor tamaño para poder cursar el primer ciclo de la ESO --primero y segundo--. El Gobierno achacó la decisión a la normativa estatal que prohibe que alumnos de Primaria compartan centro con los de Secundaria. El enfado, sin embargo, cundió entre los alcaldes afectados por la medida.

La consejera de Educación, Dolores Serrat, dio a conocer ayer la decisión durante una reunión en Teruel con representantes municipales y asociaciones de padres y madres de distintos colegios de la provincia en los que todavía se imparte el primer ciclo de Secundaria. En la capital oscense, el encargado de dar la noticia fue el director general de Ordenación Académica, Marco Aurelio Rando. Los pueblos afectados son: Cedrillas, Aliaga, Cuevas de Almudén, Hinojosa de Jarque, Perales de Alfambra, Muniesa, Castellote, Cuevas de Cañart, Tramacastilla y Royuela, en Teruel. Y GurrEa de Gállego, Tardienta, Boltaña, Benabarre y Alcorricón, en Huesca.

SIN CAMBIOS El Gobierno mantendrá, con carácter excepcional, 1° y 2° de la ESO en 22 aulas rurales de Teruel y 6 de Huesca, porque se encuentran lejos de un centro de Secundaria o cuentan con un elevado número de alumnos en estos cursos. Los estudiantes de los 15 pueblos afectados tendrán que desplazarse entre 7 y 36 kilómetros para acudir a sus institutos de referencia.

Serrat recordó que impartir la ESO en centros de educación Primaria "es una excepcionalidad que se ha mantenido 16 años en Teruel y Huesca, no en Zaragoza", lo que calificó como una situación "irregular". Y advirtió que la alternativa a la excepcionalidad es "café para todos", es decir, suprimir el primer ciclo de Secundaria en todos los centros de Primaria.

Pese a ello, la decisión no ha gustado en los municipios. El alcalde de Cedrillas, José Luis López (PSOE), defendió que la mejor solución es "quedarnos como estamos", teniendo en cuenta que "la provincia de Teruel es complicada" y que la situación "para nada distorsiona el presupuesto del departamento". En su opinión con esta medida se "facilita la sensación de desánimo a vivir en los pueblos".

Tampoco en Huesca sentó bien la medida. Los representantes de las localidades altoaragonesas que perderán el primer ciclo de la ESO lamentaron la situación. Benabarre es una de las localidades donde desaparecerá la Secundaria el próximo curso debido a que no cumplirá el criterio mínimo de alumnos. Este curso estudian un total de 18 alumnos que se deberán desplazar el próximo curso al instituto de referencia, en Graus, a 19 kilómetros. El alcalde, Alfredo Sancho (PSOE), criticó la "arbitrariedad" con que, dijo, ha actuado Educación. "Mostramos nuestra disconformidad y nuestra pelea será que se pueda mantener, porque el número de alumnos que es lo que se argumenta es un hecho puntual que en los años posteriores se vería superado". Ana Domínguez (PSOE), teniente de alcalde del Ayuntamiento de Altorricón, señaló: "Nos hemos quedado sin el primer curso y se supone que el próximo curso acabará de desaparecer el primer ciclo de Secundaria que teníamos desde siempre. No estamos de acuerdo en que habitualmente los centros rurales vayan perdiendo servicios".