La consejera de Educación, Dolores Serrat, comparecerá el próximo 7 de mayo, jueves, ante la Diputación Permanente de las Cortes, para explicar las decisiones que le han llevado a autorizar a la Universidad San Jorge la implantación del grado de Magisterio, según la oposición parlamentaria en detrimento de los campus de Huesca y Teruel.

Cuando se conoció la decisión del Gobierno de Aragón de autorizar la implantación de los grados de Educación Infantil y Primaria en la universidad privada, el PSOE presentó una solicitud para que se convocara la Diputación Permanente y compareciera en ella la consejera, con el fin de explicar las razones que llevaron al Consejo de Gobierno a autorizar el grado, petición que ha sido aprobada hoy por unanimidad en la Junta de Portavoces.

Los cinco grupos, por tanto, han respaldado que se produzca la comparecencia de Serrat, que tendrá lugar la mañana del mismo día que comienza la campaña electoral para los comicios autonómicos y municipales del 24 de mayo.

Los tres portavoces de la oposición se han mostrado muy críticos con la decisión de autorizar la implantación de estos estudios, y han recurrido a argumentos parecidos, entre ellos que supondrá un grave perjuicio para los campus de Huesca y Teruel, donde se imparte ya este grado, y que la decisión no responde a criterios de calidad y reequilibrio territorial, sino a cuestiones economicistas.

El portavoz socialista, Javier Sada, ha dicho en declaraciones a los medios tras la reunión de la Junta de Portavoces que la autorización de la implantación del grado supone "una ruptura del acuerdo" sobre la duplicidad de grados en la universidad pública y en la privada, en el sentido de que los estudios autorizados para la San Jorge "no podrían coincidir" con los implantados en la Universidad de Zaragoza, especialmente en sus campus periféricos.

Sada ha hecho referencia además a la "amplia, contundente y unánime" postura en contra de la autorización en Huesca y Teruel, y viene además a dar "una vuelta de tuerca más" a la situación de la universidad pública, con problemas de financiación y obsolescencia de sus infraestructuras.

Además, ha hecho referencia a un informe del Tribunal de Defensa de la Competencia, relacionado con la petición anterior de la universidad privada de implantar el grado de Psicología, que asegura que el Gobierno de Aragón en este asunto no tiene el papel de garantizar la libertad de mercado, como aduce Serrat, sino que tiene que actuar como "regulador", es decir, "velar por la vertebración y la calidad".

Por CHA, Gregorio Briz también ha considerado que la autorización responde "a criterios economicistas y empresariales", que podrían entenderse si hubiese demanda de plazas, pero ha insistido en que no es así y que lo que se pretende es "desvestir a un santo para vestir a otro".

Ha lamentado que las decisiones importantes sobre la universidad no se tomen con consenso y ha exigido a Serrat que explique "su apuesta" por la San Jorge.

La portavoz de IU, Patricia Luquin, pedirá la revocación de la autorización, porque se duplica la titulación "desde parámetros economicistas sin tener en cuenta la calidad ni el equilibrio territorial" y porque existe un "clamor popular" en Huesca y Teruel para que así se haga.

Por su parte, el portavoz del PAR, Alfredo Boné, quiere saber si la decisión se ha adoptado después de intentar llegar a un consenso con los actores implicados, especialmente la universidad pública.

"No ponemos en cuestión la legalidad del acuerdo, la cuestión es si se ha abordado desde el diálogo con la Universidad de Zaragoza", ha dicho Boné, quien también ha indicado que es "una falacia" decir que la distribución de servicios en el territorio contribuye a la vertebración.

Finalmente, el portavoz del PP, Antonio Torres, ha dicho que es "rotundamente falso" que el Gobierno de Aragón apoye más a la universidad privada que a la pública.

Ha recordado que fue un gobierno socialista quien autorizó la implantación de la universidad San Jorge y que la propia Universidad de Zaragoza ha concedido títulos a los campus de Huesca y Teruel "con calzador y eran los que no quería para Zaragoza", por lo que "hay mucha gente que debería hablar y se esconde".