El hospital Miguel Servet de Zaragoza está adherido, desde finales del 2016, a la Red Europea de Hospitales Sin Humo y la lucha contra el tabaquismo es uno de sus objetivos. Así, desde el centro sanitario se plantean como próximo reto aplicar la deshabituación tabáquica en pacientes ingresados, ya que actualmente el tratamiento que se hace es ambulatorio.

«Lo que queremos hacer es intervenir con personas que fuman y que ingresan por otras patologías como un infarto o una fractura de rodilla. Esos momentos hacen a las personas vulnerables, porque se llevan pequeños sustos de salud, y creemos que ahí sería interesante ofrecerles que, durante su estancia de ingreso, intenten dejar de fumar», explicó ayer a este diario la neumóloga Begoña Gállego, del servicio de Neumología del hospital Miguel Servet.

«Si en ese momento les ofrecemos información y se les pone en tratamiento muy posiblemente no volverán a fumar», añadió Gállego, quien precisó que «queda casi todo por hacer en la pelea contra el tabaquismo y, en 20 años, hablaremos de una epidemia igual que ahora lo es la obesidad», añadió.

Respecto a las personas que atienden en el Servet en consultas ambulatorias para dejar de fumar, la neumóloga destacó «en el apartado de los trabajadores del centro hay más presencia de mujeres, mientras que como pacientes son más hombres», dijo.