El vicealcalde y responsable de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Zaragoza, Fernando Gimeno, admitió ayer que los ingresos previstos en el presupuesto municipal procedentes de la venta de suelo no solo no llegan sino que se aplazan y, en algunos casos, vencen los plazos sin que el adjudicatario haya ingresado ni un euro en las arcas públicas. De los 38 millones de euros que se preveían, no se ha recibido nada.

Gimeno detalló que se han tenido que aplazar "hasta el 1 de junio del 2013" el cobro de ventas que deberían haberse materializado este año. Y que también en este ejercicio, otros 20 millones que se debían haber ingresado, fruto de anteriores aplazamientos, se han acabado anulando. Este es, según el vicealcalde, "uno de los problemas más importantes de la gestión presupuestaria". El concejal Carmelo Asensio, de CHA, le pidió que al menos ejecute los avales depositados por las adjudicatarias.