Se acabó lo de entrar a clase cuando suene la sirena. Al menos, ya no es así en el colegio Juan Lorenzo Palmireno de Alcañiz. Su proyecto se basa en sustituir ese sonido por la música. La idea se llama Entramos cantando y procede de la directora -y también profesora de Música- Carmen Giner. «Cada semana hay una música diferente. Si algún día no suena la música, lo echan muchísimo de menos», apunta. Para fomentar la creatividad de sus alumnos, se les deja a su disposición un corcho, colores, dibujos u objetos para que puedan plasmar lo que les evoca la música de esa semana. Los viernes, además, eligen ellos lo que suena.