La oenegé SOS Racismo Aragón denunció ayer un ligero aumento de los casos de racismo y xenofobia en el 2011, respecto al año anterior, durante la presentación del balance de la Memoria 2011 del colectivo. Durante el pasado curso, la Oficina de Información y Denuncias de SOS Racismo Aragón atendió 521 consultas. De ellas, 152 fueron casos de racismo y xenofobia por los que se abrió un expediente. Sin embargo, en el 2010, las actuaciones expedientadas fueron 138. "Hemos observado un ligero aumento de los casos de racismo, además el año pasado fue especialmente duro tras la estricta aplicación de la Ley de Extranjería", analizó Katrina Belsué, coordinadora de la oficina.

El perfil de las víctimas de estos incidentes es el de inmigrantes de entre 25 y 54 años, principalmente varones de procedencia africana o sudamericana. Además, según la oenegé, la crisis económica ha provocado el recrudecimiento de las actitudes racistas en plena calle. "Muchos de los poderes públicos hemos comprobado como, durante la campaña electoral, han utilizado al colectivo inmigrante como chivo expiatorio", lamentó Belsué. Por este motivo, la visión que se ha ofrecido de estos colectivos es negativa, ya que se les ha relacionado con términos de "inseguridad y problemas laborales, en lugar de palabras como convivencia", explicó.

Para revertir este tipo de situaciones, SOS Racismo Aragón desempeñó, durante el 2011, un extenso trabajo en el área de pedagogía. A través de este sector se trabaja en el asesoramiento a diferentes instituciones académicas mediante acciones con el alumnado, el profesorado y las familias.

FORMACIÓN "La labor de sensibilización y prevención en los colegios es necesaria como una primera incursión para llegar a los núcleos familiares", indicó la coordinadora. En este sentido, durante el pasado año, el número total de participantes en las actuaciones del área de pedagogía de la oenegé fueron de 1.446 personas.

Esta labor se ha desarrollado por medio del programa para el fomento de la convivencia intercultural en el ámbito educativo, el plan de prevención del racismo en Utebo, los talleres de prevención en la Casa de las Culturas de Zaragoza, charlas sobre parejas mixtas y formación en Educación para la Ciudadanía.

Sin embargo, a pesar de esta iniciativa, los casos siguen entrando al colectivo. Primero con una entrevista con la víctima, para, en el caso de que la denuncia sea aceptada mediante una comprobación previa, pasar a la distribución del caso entre los voluntarios. Si tras la investigación de los hechos no se llega a una solución, se inicia la vía judicial. "El pasado año tres casos llegaron al juzgado. Uno por agresión policial, otro de una ama de casa y otro por insultos", explicó.