Un total de 77 personas fallecieron en las carreteras y zonas interurbanas de Aragón durante el pasado año. Una escalofriante cifra que desde Stop Accidentes quieren verla disminuir. Por ello, ayer, durante la celebración del día mundial en recuerdo a estas víctimas, desde este colectivo solicitaron que se reforme el Código Penal, durante una concentración en la plaza del Pilar.

Para Miguel Ángel Bernal, perteneciente a esta asociación, la siniestralidad en las carreteras no solo es culpa del mal estado de las mismas, sino también a los despistes de muchos conductores. Apuntó que el uso del whatsapp del móvil o el fumar "provoca que la concentración al volante no esté al 100%". "Si me apuras, hasta el manos libres también es negativo porque se está manteniendo una conversación en la que es necesario pensar en otras cosas e, incluso, muchos mueven las manos y eso significa soltarlas del volante", aseveró. Desde este colectivo entienden que la actual reforma de la normativa "ha despenalizado" los accidentes, por lo que solicitan su derogación y la creación inmediata de una comisión de seguimiento de aplicación para el nuevo baremo de tráfico.

Asimismo, reclamaron la modificación del Estatuto de la Víctima, ya que "no tiene dotación presupuestaria y no se va a llevar a cabo" y que los accidentes se conviertan en una prioridad política, a través de un pacto de Estado.

De hecho, Bernal quiso recordar al Gobierno de España y al aragonés la necesidad de apostar por la mejora de las carreteras. "No podemos olvidar, en un día de recuerdo, a las víctimas la N-II y la N-232 debido a que allí muchas personas han perdido sus vidas por falta de compromiso e inversión, señaló, mientras incidió en otra necesidad, que en su opinión, está "aún más olvidado" como son las carreteras comarcales. "Aragón tiene más de 700 municipios que se comunican", recalcó.