Es dura la política. Marcelino Iglesias se acercó al hijo de la ya consejera de Educación, Mayte Pérez y le preguntó si lo conocía. El pequeño Jorge fue sincero: No. Se lo explicó su madre, que ayer vestía de verde, como las mareas, y que lucía un collar con un escarabajo: "Para que nos dé suerte", dijo.

Ayer fue un día para las familias de los nuevos consejeros, que se hicieron la foto de equipo en las escaleras del Pignatelli por donde entran los trabajadores públicos. Símbolo y declaración de intenciones. Antes, en el acto de toma de posesión, con 500 personas se conjugó la emoción y los gestos. Como el de la propia Mayte Pérez, que se abrazó nada más bajar del escenario a su madre, Maruja. La consejera recordó a su padre, ya fallecido, y sobre todo recibió felicitaciones. Las de muchos socialistas, como Antonio Arrufat, Ana Fernández, Julio Tejedor o Gonzalo Arguilé. Correteaba el hijo de Pilar Alegría perseguido por su padre; Mariví Broto se abrazaba a Jesús Miguel Franco.

Javier Lambán estuvo acompañado por su mujer, Marisa, y por su hija. El presidente se mantuvo ayer en un discreto segundo plano, pero se le vio relajado en el primer Consejo de Gobierno. Ya tiene su equipo, que ayer tomó posesión, ocupó sus despachos, comenzó a trabajar, bajo el signo del escarabajo.