La segunda fase de los trabajos de reforma interior que se realizan en el edificio principal del tanatorio de Torrero ya han concluido. Se han modernizado los ocho velatorios ubicados en la primera planta, pero la transformación del edificio continuará a partir del próximo lunes con el cierre del pasillo que da acceso a los velatorios de la planta baja, situados a la derecha de la escalera principal, en concreto los números 1, 2, 3 y 4.

La concesionaria del complejo funerario de Torrero, Serfutosa, comenzó el 7 de julio una intervención en el edificio principal del tanatorio, que tiene como objetivo modificar la decoración de las estancias, dotándolas de mayor confort para los usuarios. La inversión prevista para estos trabajos es de 709.000 euros y el plazo previsto de la intervención es de cinco meses, aunque se ha dividido en varias fases para asegurar el uso ciudadano de las instalaciones.

Hasta el momento, se han realizado transformaciones en los dos pasillos de velatorios de la planta primera. Ayer mismo entraron en servicio los velatorios 15, 16, 17 y 18, situados en el pasillo izquierdo de la primera planta, una vez que han concluido las tareas de reforma y de limpieza.

El próximo lunes, 25 de agosto, las obras se trasladarán a la planta baja y volverán a cerrar al público cuatro velatorios. Mientras duran las obras, las necesidades de ciudad se atenderán en las 15 salas que permanecen operativas (doce en el mismo edificio y tres en el edificio B del complejo, que se rehabilitó en el 2011). Precisamente, una de las razones para organizar los trabajos en fases radica en la necesidad de mantener la actividad de las salas, donde las familias y los amigos velan a sus fallecidos antes de la inhumación o de la incineración.

FUSIÓN DE CAPILLAS

Una vez que concluya la puesta al día de todas las salas de velatorios, se abordarán los trabajos que afectan al hall y a dos de las capillas, que se refundirán en una de mayores dimensiones. La última fase de obras se realizará en la primera planta en la zona de despachos y cafetería.

Los trabajos que se están desarrollando suponen el pintado de las salas y pasillos con un revestimiento vinílico en color blanco, el forrado de las paredes con láminas de madera de roble, que además de generar más calidez en las estancias, mejoran la acústica del edificio. Los cambios afectan también a las puertas, que se sustituyen por otras de mayores dimensiones, con paños de cristal en la zona superior para tamizar la luz natural; a la iluminación eléctrica, que se utiliza para lograr ambientes de mayor sosiego, y al mobiliario.

La luz artificial también se modificará, eliminando las luminarias directas por otras indirectas, que contribuyen a resaltar el ambiente de sosiego que se quiere transmitir. Este efecto será notorio en los velatorios que dan al conjunto un aire completamente renovado.