Eduardo Martínez, psiquiatra del sector II de Zaragoza, mostró ayer su sospecha de que la centralización de las unidades de salud mental esconda la posible "privatización" del servicio por parte de Sanidad. El profesional, además, negó que, tal y como sostiene el departamento, la propuesta de unificación partiera de los propios profesionales. "Es mentira y absolutamente falso", aseguró el psiquiatra, que añadió, a este respecto, que la petición de firmas de adhesión al proyecto --propuesto por la jefa de servicio de Psiquiatría del centro, María Jesús Pérez--, "se realizó posteriormente".

En este sentido, desde la Administración se apela a que únicamente tres de los 24 profesionales --entre psiquiatras y psicólogos-- de salud mental del hospital se opusieron a esta medida, pero Martínez cuestiona el "apoyo mayoritario" al proyecto unificador esgrimido por Sanidad. "El servicio de Psiquiatría del Miguel Servet consta de 21 psiquiatras y 2 psicólogos y, de ellos, tan solo 14 profesionales tienen su plaza en propiedad --13 psiquiatras y un psicólogo-- y de ellos tres no firmaron el documento de adhesión, lo que representa el 21,43% de la plantilla fija del servicio", expuso.

Martínez pronunció estas palabras ante la Comisión de Comparecencias y Peticiones Ciudadanas y como miembro de la plataforma por la Salud Mental en los barrios de Zaragoza, constituida tras el anuncio del Ejecutivo autonómico de agrupar en dos unidades, Valdespartera y Sagasta, las seis ubicaciones existentes --Rebolería, Las Fuentes, San José, Casablanca, Sagasta y Torrero-- para a la atención ambulatoria de estos pacientes.

Además, Martínez se refirió a la recienta inauguración del Hospital de Día "con plantilla de nueva creación" para subrayar que la unificación "ha perdido sentido, suponiendo que alguna vez lo tuviera".

La plataforma, que reclamó la "congelación sine die" del proyecto y la "concreción e implantación" de un plan de salud mental autonómico "consensuado", solicitó, a través de su portavoz, María Ángeles Cardiel, la "recuperación de la normalidad en este servicio y que las unidades de atención en salud mental permanezcan en los barrios" y demando a los diputados "amparo, defensión y justicia".