La zona habilitada para acampada en las próximas Fiestas del Ángel de 2017 se duplicará respecto al año pasado hasta las 555 parcelas, después de la buena aceptación de la medida que se puso en marcha el pasado año por primera vez.
Así lo ha explicado hoy a los medios la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, después de la celebración de la Junta de Seguridad de las próximas fiestas de la ciudad. Las parcelas contarán cada una con espacio para un coche, una tienda de campaña y cuatro personas.
La medida, ha explicado la primer edil, sirvió ya el pasado año para descongestionar otros lugares de la capital y minimizar la acampada en lugares no permitidos.
Además, como en años anteriores se establecerán distintas zonas de aparcamiento para los visitantes que esos días llegan a la ciudad en la zona de Los Planos, en la Fuenfresca, Hogar Comandante Aguado y en la zona de la estación del ferrocarril.
También se coordinará la llegada de autobuses de otras ciudades con la Policía Local para facilitar el tráfico, descongestionando el centro al dirigirlos por la vía perimetral a la zona del Colegio Miguel Vallés.
Buj ha agradecido la implicación de todos los colectivos que ha permitido poner en marcha medidas que han mejorado mucho la calidad de la fiesta.
Como ejemplo ha citado la prohibición de la entrada de vidrio a la Plaza del Torico en el multitudinario acto de la puesta del pañuelico, lo que provocaba heridas en los pies por cortes con trozos de vasos o botellas.
"El dispositivo está funcionando muy bien y este año vamos a repetirlo con la colaboración de voluntarios", ha apuntado.
Por otra parte, la alcaldesa ha recordado que este año el Ayuntamiento se suma a la campaña contra las agresiones sexistas, como muchas otras ciudades en este tipo de fiestas.
Por ello, por primera vez la unidad de violencia de género de la Subdelegación del Gobierno se ha incorporado a las reuniones de esta Junta Local de Seguridad.
El subdelegado del Gobierno, José María Valero, ha explicado que el dispositivo de fiestas aumenta respecto a años anteriores por el nivel 4 de alerta, con una fase de prevención que comenzará en los próximos días y una de actuación en los días de fiesta.
Así, 230 agentes de la Guardia Civil, 50 de ellos de tráfico, se encargarán de controlar los accesos a la ciudad y la seguridad en los trayectos tanto en tren como en autobús y vehículos particulares, en colaboración con la Policía Nacional.
Seguirá habiendo controles de alcohol y drogas en las entradas y salidas de la ciudad, medidas que hasta ahora, ha dicho, han dado resultados muy positivos en la prevención de accidentes.
Unos 135 agentes de la Policía Nacional colaborarán estos días con las labores de prevención y seguridad, contando con la plantilla de Teruel y las unidades específicas procedentes de Zaragoza especializadas en eventos en los que participan muchas personas, anticarteristas y la unidad canina para control de drogas y estupefacientes en controles de estación de autobuses, tren y vehículos.
Las entradas y salidas a la ciudad estarán controladas por parte de tráfico tanto por carretera como por aire a través de un helicóptero.
En total, 365 agentes velarán por la seguridad durante todas las fiestas, además de la Policía Local y Adscrita, en estricta coordinación con los Voluntarios de Protección Civil, Cruz Roja, Seguridad Privada y dispositivo sanitario. Además, habrá dos unidades de denuncia en la comisaría en vez de una, que es lo habitual.
