La coordinadora Teruel Existe hizo ayer un llamamiento a la participación, el próximo sábado, 1 de abril, en una movilización ciudadana que prevé realizar un desplazamiento en tren desde Valencia a Zaragoza, para denunciar el estado de una línea férrea que «están dejando morir como en una eutanasia pasiva».
Así se expresó el portavoz de la coordinadora, Manuel Gimeno, durante la presentación del cartel de la movilización, que incluye una imagen reciente de la «mejor parte de la línea», de Teruel a Zaragoza. Se trata del tramo de alta velocidad en Navarrete, preparado teóricamente para trenes a 220 kilómetros por hora, que es imposible que alcancen.
Gimeno destacó la «situación crítica» en que se encuentra esta vía, especialmente tras los apoyos políticos al corredor Cantábrico-Mediterráneo por Tarragona.
La movilización convocada prevé el desarrollo de acciones reivindicativas a todo lo largo del camino, incluyendo las tres capitales de provincia aragonesas.
Así, a las 8.30 horas está prevista la lectura de un manifiesto en la Estación del Norte de Valencia, poco antes de tomar el tren; a las 11.57 está previsto que lleguen a Teruel (recibidos por la manifestación que saldrá del ayuntamiento, una hora antes) antes de continuar el recorrido hasta Zaragoza.
Gimeno confió en la movilización ciudadana, que ya tuvo «mucho que ver» con que no se cerrase la línea en el año 2000, tras producirse cinco descarrilamientos. Ahora ven otro momento crítico en el hecho de que el tren que transporta los coches de General Motors a Valencia haya dejado de pasar por Teruel para dar un rodeo por Tarragona,
Gimeno calificó además de «lamentable» el acuerdo del presidente Lambán con Susana Díaz sobre el corredor Cantábrico, un convenio «político pero no de partido, y no para defender el territorio».
