Teruel vivió ayer, en medio de una gran expectación, uno de los actos más populares de las fiestas de la Vaquilla: la multitudinaria merienda que se celebra en la plaza de toros de la ciudad, que contó con miles de asistentes.

El acto coincidió con la exhibición de los toros de soga y la suelta de vacas, los primeros de la ganadería de Teodoro Adell, de Castellote, y las segundas de la ganadería de José Arriazu, de Ablitas (Navarra).

El coso taurino de Teruel fue asimismo, horas antes, de la suelta de un toro embolado, un espectáculo gratuito que empezó pasada la medianoche y que congregó a un numeroso público.

RETIRADA DEL PAÑUELICO / Por la mañana, a las 12.00 horas, tuvo lugar una misa en honor del Santo Ángel Custodio, patrón de la ciudad, a la que los asistentes acudieron con el típico atuendo de los peñistas.

A las 17.30 se organizó otro acto propio de la Vaquilla, el desfile de las 20 peñas existentes en la ciudad, que asimismo contó con una gran concurrencia.

Hoy Teruel despedirá las fiestas del 2018 con los habituales festejos taurinos, los toros ensogados y embolados, unos en el coso y otros en la plaza del Torico. Se trata de actividades que, al celebrarse en lunes, cuentan con un público mayoritariamente local, tras la marcha de los visitantes.

El momento central, la traca que marca el fin de fiestas en la plaza de San Juan, coincidirá en la medianoche con la retirada del pañuelico del Torico por parte de miembros de la peña Los Chachos, que a continuación lo entregarán a la alcaldesa, Emma Buj, para que se guarde hasta el año próximo.