Tráfico baraja recuperar la posibilidad de que los examinadores del carnet de conducir en la provincia de Zaragoza hagan horas extra, para reducir urgentemente el intervalo entre pruebas, que ya roza el mes y medio. Así lo apuntó ayer el jefe accidental, en la reunión que mantuvo con varios representantes de la Asociación Provincial de Autoescuelas de Zaragoza.

Su portavoz, José Luis Mazón, calificó la medida de "muy eficaz", aunque sea una solución a corto plazo. Pero no se mostró muy confiado en que se pueda aplicar, dado que depende de los presupuestos del Ministerio del Interior. Y su reducción es precisamente lo que hace que no se puedan contratar examinadores.

En un encuentro sin excesivas esperanzas, la otra buena noticia para la autoescuelas es la inminente incorporación --al parecer la próxima semana-- del nuevo jefe provincial de Tráfico, que sustituirá al jubilado Eduardo Checa. Se trata de José Antonio Mérida, el hasta ahora jefe en La Rioja. Hoy mismo se presentará su sustituta, Beatriz Zúñiga.

Mazón aseguró que saben que Mérida "conoce la problemática" de los examinadores en Zaragoza y tiene "la mejor disposición" para solventarla. Algo que comparte con la cúpula de la jefatura provincial y la Delegación del Gobierno, indicó el portavoz. Pero la buena disposición, sin presupuesto, no ha valido de mucho hasta ahora.

DOS AÑOS

El problema tiene ya dos años de antigüedad. La jubilación de examinadores y la falta de presupuesto hizo que pasaran de 13 a seis, con tres refuerzos puntuales de Madrid, para toda la provincia. Las pruebas han pasado de celebrarse cada semana a cada mes y medio.

Esto supone que los alumnos dejan las prácticas y las retoman solo cuando les avisan, con poco plazo, de que les toca examinarse. Aumentan los suspensos, y las autoescuelas reducen sus ingresos hasta el punto de que han tenido que cerrar unas 50.