Los Tranvías de Zaragoza finalizarán mañana los trabajos de mantenimiento y reparación de aquellas vías que han resultado dañadas en las intersecciones con la calzada. Tan solo han pasado tres años desde que se pusiera en servicio todo el trazado, entre Valdespartera y Parque Goya (cinco desde su estreno hasta Gran Vía), pero ya sufre los efectos del intenso tráfico y el continuo paso de coches que soporta en algunos de los cruces. La semana pasada inició una revisión de todo el eje norte-sur y ha actuado en tres tramos concretos: la rotonda de Toulousse y en los intercambiadores de Pablo Ruiz Picasso. El coste lo asume de forma íntegra la concesionaria.

Mañana finalizarán los trabajos en la rotonda de Toulousse, junto a Vía Ibérica, que comenzaron ayer a las 22.00 horas. Para evitar afecciones, los operarios actúan en horario nocturno, hasta las 07.00 horas, ocupando dos carriles de circulación. Esta glorieta soporta a diario un gran número de coches. Según los últimos datos de aforos de tráfico (2014), desde Fernando el Católico recibe más de 13.800 turismos y desde Vía Ibérica 16.775. Por el Tercer Cinturón llegan alrededor de 15.000 coches por ambos sentidos.

En el barrio del Actur, el pasado lunes finalizaron las acciones de reparación del trazado que se encuentra en la calle María Zambrano a la altura del intercambiador del tranvía de Pablo Ruiz Picasso, en el carril derecho más próximo a la vía del tranvía. Esta rotonda soporta cada día el paso de más de 52.400 coches. En la confluencia de Ruiz Picasso con Gertrudis Gómez de Avellaneda son más de 42.000.

EN EL COSO

El Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) aprobó en pleno una de las reivindicaciones de los taxistas: permitir la circulación por la trazada del tranvía en el Coso. También podrán hacerlo las bicis. Una iniciativa que no convence a la sociedad Los Tranvías por el desgaste que genera en los raíles el paso diario de vehículos. El ayuntamiento se comprometió a asumir el coste de los trabajos de mantenimiento de las vías en este tramo. Para poder cumplir con este compromiso, ZeC tiene que modificar la ordenanza. Algo que no ha hecho todavía.

Por otro lado, varios colectivos ecologistas y vecinales denunciaron la "mala gestión" y la "falta de protección" del arbolado en Gran Vía durante las obras de construcción de la línea 1.