El Tribunal de Cuentas ha detectado varias irregularidades en la contratación y el desarrollo de las obras de la Línea 1 del tranvía de Zaragoza. Destacan los pagos indebidos a la Sociedad de Economía Mixta de Los Tranvías (SEM) de 416.000 euros por una bonificación por una obra que no terminó a tiempo y otros 200.000 por la revisión de precios del billetaje. El documento constata que no se produjo ningún sobrecoste, entre otras cosas, porque se trataba de una obra faraónica a precio cerrado, que ascendió a 194 millones. El Gobierno de la ciudad anunció ayer que presentará alegaciones. Los Tranvias rechazaron hacer cualquier valoración.

Los concejales de Economía y Movilidad, Fernando Rivarés y Teresa Artigas, presentaron ayer el Anteproyecto del informe de fiscalización del desarrollo, mantenimiento y gestión del tranvía de Zaragoza que zanja uno de los debates más polémicos sobre el Urbos 3, si costó más de lo acordado. El documento, que recoge datos hasta el 31 de diciembre del 2014, dice que no. Sí que admite movimientos que no cumplen con la Ley de Contratos del Sector Públicos y pagos «indebidos», según Rivarés, que aseguró que «este informe despeja las pocas dudas que quedaban respecto a las obras del tranvía» licitadas por el anterior gobierno socialista.

Se trata de 416.000 euros que corresponden a una bonificación por «pronta ejecución» por una obra que se entregó más tarde de lo previsto y que estaba valorada en más de 4 millones. Aún así, la empresa recibió el 100% de la subvención, incluyendo el 10% en concepto de bonificación. En total había 16 hitos que se fueron cumpliendo con antelación, salvo el número 6, correspondiente a «la entrega de dos unidades de material móvil», que se certificó con posterioridad.

Por otro lado, se abonaron 200.000 euros de más en la revisión de precios del billetaje. Durante los seis primeros meses de funcionamiento del tranvía, el consistorio no realizó control alguno sobre los datos facilitados la SEM, existiendo «carencias de medición», según el Tribunal de Cuentas. Además de hacer una revisión al alza, se realizó con retrasos de cuatro a 12 meses respecto a las previsiones contractuales.

CAMBIO DE OBRAS

El Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) no descarta reclamar esta cantidad a Los Tranvías. «Son dos pagos que no debían de haberse hecho. Cuando tengamos los informes se los servicios de Movilidad y jurídicos quizá los solicitemos», explicó Rivarés.

El Tribunal de Cuentas también constata que los importes de algunos capítulos de la fase 1 variaron con respecto al proyecto aprobado. Se trata de varias obras que ascendían a 1,8 millones y que «no tuvieron efectos económicos» en el ayuntamiento al ser la SEM la única responsable. Hubo obras que costaron más de lo previsto y otras que no se ejecutaron sin que aparezca justificado por parque del ayuntamiento o de la sociedad.

Los Tranvías realizó la subcontratación para el diseño y la construcción de la infraestructura ferroviaria y del suministro eléctrico por 194 millones (176,5 y 17,5 respectivamente) con integrantes de la propia SEM. Según el Tribunal de Cuentas esta «subcontratación no se ajustó a lo dispuesto» en la Ley de Contratos al tratarse de una de las «prestación principales del contrato».