José Miguel Aspas, arquitecto madrileño que en las últimas elecciones fue elegido alcalde de la pequeña localidad turolense de Villar del Cobo por el Partido Popular, rige este municipio de apenas 175 habitantes. Pero también es la identidad que se oculta (más bien se ocultaba) tras el seudónimo de Pastrana, una cuenta en la red social Twitter, con alrededor de 100.000 seguidores, con la que desde hace años se mantenía como azote de la izquierda, en particular de Podemos y el independentismo catalán. Un troll para unos (como se conoce a los que se dedican a lanzar comentarios hirientes o maliciosos), un ídolo para otros, cuyo desenmascaramiento genera intensos debates sobre la privacidad.

La identidad de Pastrana como alcalde del PP fue revelada por otro usuario de Twitter, igualmente anónimo pero de corte radicalmente distinto, podemista. Este comenzó a colgar detalles cruzados de las cuentas de Pastrana y de su identidad real (como ubicaciones o fotos de su gato) que apuntaban a que se trataba de Aspas, el pasado 26 de enero. A él se lo hicieron un día después. Apenas cinco días después, el primer edil lo confirmaba en una entrevista con Libertad Digital, y ayer El Mundo publicaba otra conversación con él.

Este diario no pudo contactar con Aspas, envuelto en la polémica desde que se reveló sin su consentimiento su identidad real. No han sido pocos los comentarios de otros usuarios que, sabiendo su condición de alcalde popular, le han echado en cara tuits anteriores. Parece que anteayer se dio un descanso de la red social, aunque en su último mensaje anunciaba: «Volveré».

En sus mensajes anteriores (borró muchos tras trascender su identidad, dijo que por proteger a su entorno), decía frases como «se fusila poco» en España, o reflejaba denuncias de acoso de independentistas publicando su puesto de trabajo.

En las entrevistas que ha concedido afirma que la primera, por ejemplo, era una broma con un amigo, y la segunda solo reflejaba la información que el mismo denunciante había dado, por amenazas a su negocio, «no un dato personal».

Pastrana se ha ido haciendo célebre entre otras cosas por sus polémicas tuiteras con el diputado de ERC Gabriel Rufián, al que le replicó una vez: «no ‘soy’ de C’s ni ‘soy’ del PP». Se refería, ha aclarado después, a que no es afiliado del partido, ni cobra un euro por ser alcalde, como no lo hizo de concejal.