"El comisario europeo de Empleo, Asuntos Sociales e Inclusión coincide con nosotros en la necesidad de apostar por nuevas vías de financiación de cara a combatir los problemas demográficos". Así lo aseguró ayer el consejero de Política Territorial e Interior, Antonio Suárez, a la salida de la reunión con Laszlo Andor, que se celebró en Bruselas, y en la que estuvo acompañado por los consejeros de Asturias, Galicia, Castilla y León, Castilla-La Mancha y Extremadura.

Una reunión en la que, según explicó Suárez, "el comisario Andor comparte que en España hay un problema estructural en materia de despoblación, un problema que padecemos más de 40 regiones europeas, y que en el camino de los nuevos fondos no hay que apostar tanto por las infraestructuras por las que hemos apostado estos años atrás sino por capital humano, especialmente por la gente joven, pues es ahí donde se tienen que volcar las vías de financiación tanto a nivel del Gobierno de España como en Europa". En opinión del consejero hay un camino posible a trabajar para que con los nuevos fondos, a partir del año 2020, "se instalen vías de cara al problema demográfico".

Suárez aseguró que se abrieron distintas vías para poder seguir trabajando en esta dirección tanto en el Comité de las Regiones, como en el Parlamento Europeo y la Comisión.

Cabe recordar que existen numerosas zonas en Aragón que ya están sufriendo procesos de despoblación, muy acusados sobre todo en los municipios más pequeños. Y se dan dos circunstancias muy "preocupantes": el grado de envejecimiento es muy alto y el reparto de la población es tremendamente desequilibrado. Según los datos aportados por el consejero, el crecimiento vegetativo de la población aragonesa es negativo contrariamente a lo que ocurre en España.

Ha aumentado mucho el sobreenvejecimiento, que indica el peso de las personas de 85 y más años sobre el conjunto de la población, hasta situarse en el 17% en el 2013, superior al español, que es el 14,3%. Y la tasa de dependencia, la que relaciona la población económicamente inactiva con la activa, es del 51,8%, es decir, 3 puntos por encima de la media nacional. El territorio aragonés se caracteriza por un notable desequilibrio.