La Policía Local detuvo a las ocho de la mañana de ayer en Huesca a un hombre que fue descubierto cuando circulaba a 121 kilómetros por hora por la calle de Alcañiz. Los agentes le imputaron la presunta comisión de un delito contra la seguridad vial, dado que en ese punto de la ciudad la velocidad está limitada a 40 por hora. El conductor, que conducía un BMW 335i, dio negativo en la prueba de la alcoholemia.

Por otro lado, la Policía detuvo en Jaca a un joven de 28 años que simuló el robo de su vehículo tras sufrir un accidente de madrugada para evitar ser denunciado por conducir bajo los efectos del alcohol. El accidente se produjo la madrugada del 19 del pasado mes de noviembre en una céntrica avenida de la capital jaquesa y el vehículo quedó destrozado.