Un senderista de 18 años fue atacado el pasado martes por un jabalí cuando recorría con raquetas de nieve el sendero GR-11, que corre paralelo a los Pirineos. El joven, C. P. R., que es vecino de Albalate de Cinca, sufrió lesiones en la cadera y recibió un mordisco en una muñeca. Dada la importancia de las heridas tuvo que ser evacuado por un equipo de rescate de la Guardia Civil que lo trasladó en helicóptero al hospital San Jorge, en Huesca. El herido formaba parte de un grupo de 15 alumnos y tres profesores de un instituto de enseñanza media que recorría al atardecer el sendero nevado que comunica con el refugio de Estós, dentro del parque natural de Posets-Maladeta, en Benasque, según la Subdelegación del Gobierno en Huesca.

La Benemérita recibió el aviso del ataque a media tarde, cuando ya faltaban pocos minutos para anochecer, por lo que no pudo salir al rescate con el helicóptero UHEL-41 que utiliza en estos casos.

En su lugar, componentes de los grupos de rescate de la Guardia Civil (GREIM) de Benasque se dirigieron a pie al lugar de los hechos, para lo que tuvieron que utilizar raquetas debido a la gran cantidad de nieve que cubre los caminos tras las últimas precipitaciones.

Alrededor de las 21.30 horas del martes, los efectivos de la Guardia Civil llegaron al lugar donde se encontraba el joven y, tras una primera valoración de las heridas inciso-contusas en la cadera y muñeca izquierda, le hicieron un vendaje compresivo y le trasladaron en una camilla trineo hasta el refugio de Estós.

Hacia las 23.00 horas, al llegar al refugio, le exploraron y le curaron las heridas con el apoyo de la Central de Emergencias 061 de Aragón, dado que fue necesario desinfectarlas y colocar apósitos estériles y un vendaje.

Los socorristas establecieron durante la noche turnos de guardia para atender al joven, hasta que a las 8.30 horas de ayer pudo ser trasladado al centro hospitalario. "Es un hecho insólito", señaló José María Ciria, de la Asociación Turística del Valle de Benasque. "Es muy posible que el animal se acabara de enfrentar a otro jabalí, por la comida o cualquier otra cosa, y que estuviera nervioso", añadió. Ciria destacó que el paraje donde se produjo el suceso está dentro de un refugio nacional de caza.