Desde el pasado fin de semana, el servicio de Urgencias del hospital zaragozano Miguel Servet vuelve a estar saturado debido a una mayor presión asistencial. Así lo denunció ayer el personal sanitario del centro, que advirtió de la numerosa presencia de personas en los pasillos. "Hay hasta nueve pacientes, también en Traumatología y en los vitales porque no hay monitores en la sala", censuró una de las enfermeras de Urgencias.

Además, el personal mostró su "preocupación" por el posible cierre, esta misma semana, de la sala de observación número 3, la que habitualmente se usa como comodín abriendo y cerrando durante todo el año a conveniencia. En este sentido, el Salud aseguró que la sala "se mantendrá abierta" debido a este mayor pico de asistencia, que se prolonga ya durante cinco días, lo que habilitará esas 21 camas de observación para responder a la demanda actual.

De hecho, la cúpula del centro hospitalario tomó la decisión de no proceder a la clausura del recinto en una reunión celebrada en la mañana de ayer. "No se va a cerrar", incidieron desde el Servet, donde "poco a poco" se fue recuperando la normalidad y regresando al nivel de atención habitual.

Fuentes del Salud apelaron a un "mayor ritmo quirúrgico" como la principal razón de la saturación y del pico de afluencia de usuarios en los pasillos.

Por otra parte, los aragoneses son de los que menos esperan hasta ser atendidos en Urgencias. Así lo expone una encuesta de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) que establece que el tiempo de espera hasta la primera revisión del médico es de 24 minutos, solo por detrás de Navarra (17) y Asturias (22).

Además, el informe muestra como hasta uno de cada cinco habitantes de Cataluña o Andalucía que han acudido a Urgencias deben regresar nuevamente por el mismo problema dos semanas después. En Aragón, en cambio, esto solo le sucede al 8 por ciento de los usuarios.

Además, el informe revela una mayor satisfacción ciudadana con la Atención Primaria y las Urgencias de la sanidad pública. Así Aragón es la segunda comunidad más satisfecha, solo por detrás de La Rioja. Los ciudadanos que mejor valoran sus urgencias son los de Navarra, seguidos de los de La Rioja, Asturias y Aragón.