La comercialización de aceite de oliva entre octubre de 2017 y febrero de 2018 ha bajado un 8,94 %, hasta los 117,14 millones de litros, respecto al mismo periodo anterior, según la Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (Anierac).

De este volumen, 46,38 millones de litros fueron comercializados como "oliva virgen extra" (+5,28 %); 42,55 millones como "oliva suave" (-5,35 %); 16,38 millones como "oliva intenso" (-26,99 %) y 11,81 millones, como "oliva virgen" (-31,20 %).

Las ventas acumuladas de "orujo de oliva" en los primeros cinco meses se redujeron un 19,72 %, hasta los 6,34 millones de litros.

Las firmas envasadoras asociadas en Anierac comercializaron a lo largo del pasado mes de febrero un total de 48,10 millones de litros de aceites comestibles, un 7,03 % menos respecto al mismo mes de 2017; en el acumulado de los dos primeros meses de 2018, el volumen ha alcanzado los 99,23 millones de litros (-3,79 %).

De esos 48,10 millones de litros de aceite que salieron al mercado en febrero, 19,61 millones fueron olivas (7,6 millones "virgen extra", 7,3 millones "suave", 3 millones "intenso" y 1,6 millones "virgen"); 1,15 millones de litros, aceites de orujo de oliva y 27,34 millones, aceites refinados de semillas oleaginosas.

En el caso de los 27,35 millones de litros de aceites refinados de semillas, 24,17 millones de litros fueron de refinado de girasol; 2,94 millones, de refinado de semillas; 125.000 litros, de refinado de soja; 80.000 litros, de refinado de maíz y, el resto, corresponden a pequeñas cantidades de otros aceites de semillas.