No me gustan las medidas y eso que las he firmado yo". El ministro de Educación, José Ignacio Wert, reconoció ayer en Zaragoza, donde clausuró la sexta edición del congreso nacional del sector de enseñanza de CSIF, que a él tampoco le agradan los recortes anunciados por el propio Gobierno y expuestos a través de un decreto ley. Además, Wert incidió en que las decisiones adoptadas son "excepcionales y temporales".

Wert se refirió, principalmente, al incremento de ratios y de la jornada lectiva para los profesores y las justificó por "no poder adoptar la reducción de déficit de las comunidades autónomas que exige Europa" y apuntó que "hay que hacer en el 2012 el esfuerzo que no se hizo en el 2011".

Wert, que se reunió ayer con la consejera de Educación del Gobierno de Aragón, Dolores Serrat, dejó entrever que respetará la petición del Ejecutivo autonómico de tener en cuenta la dispersión territorial a la hora de implantar las medidas. "Pero es que esas medidas tienen su propio margen de dispersión para las comunidades autónomas y su aplicación estará en función de eso" aunque matizó la financiación que deba recibir Aragón también quedaría condicionada por esa dispersión.

Asimismo, Wert también aprobó que Aragón haya decidido no aplicar la reducción de opciones en Bachillerato en las zonas rurales. "A nadie se le obliga a suprimir modalidades, sino que es eliminar una rigidez por la obligación de ofertar dos modalidades al margen de que otro instituto de enfrente ofrezca alguna. Es una medida de carácter dispositivo que las autoridades pueden acomodar a la situación", indicó.

BECAS Asimismo, el ministro defendió que "nadie que tenga el talento, la capacidad y las ganas de estudiar en cualquier nivel", especialmente en el universitario, "se tenga que quedar sin poder hacerlo por consideraciones económicas" y aseguró que no se han reducido las becas universitarias, por lo que consideró "un argumento de combate" afirmar que muchos estudiantes podrían quedarse sin estas ayudas o ver dificultado su acceso a la universidad por la subida de tasas prevista, al tiempo que recordó que se establecerá una línea de créditos para universitarios.

El ministro insitió en que "no se han modificado en absoluto" los umbrales de rendimiento económico que permiten acceder a las ayudas"y "tampoco se ha modificado la cobertura de las becas respecto de las tasas que se pagan", por lo que "el estudiante que tenía derecho a una beca antes de estas medidas, va a seguir teniendo el mismo derecho a la beca", aunque admitió que "para nadie es agradable subir precios públicos y entiendo que especialmente para las familias", si bien recordó que, como ya informó la pasada semana, también en Zaragoza, la secretaria general de Universidades, María Amparo Camarero, el Ejecutivo establecerá un sistema de préstamos con el ICO para "paliar esta situación" y que las familias y estudiantes puedan afrontar el nuevo importe de los precios.

NOTA MÍNIMA Tras reiterar que ni el número de becas generales ni su dotación han sufrido un recorte, aunque "otra cosa son las becas complementarias", el titular de Educación se refirió también al requisito de alcanzar una nota mínima para acceder a una beca al remarcar que esta medida "va orientada a exigir un mínimo de rendimiento porque es un máximo de contribución el que la sociedad hace al pagar las becas", expuso.

En comparación con otros países, los criterios que propone el ministerio son "bastante benévolos", opinó, para apuntar que, dado que las ayudas "salen del dinero de la gente, la exigencia de rendimiento a quienes disfruten de una beca tiene plena legitimidad".

Precisamente, el ministerio propuso ayer elevar los requisitos académicos de acceso a las becas universitarias, que consistiría en que la nota media pase de 5 a 5,5 puntos en el caso de la beca general --pago íntegro de matrícula-- y de 5,5 a 6 puntos para las compensatorias o becas-salario --ayuda mensual para que los alumnos no dejen de estudiar por trabajar--. "Los alumnos deben responder al esfuerzo que hace la sociedad para garantizar estas ayudas a los que más lo necesitan", insistió ayer el ministro.