El pleno del Ayuntamiento de Zaragoza aprobó ayer que en el 2017 se altere el día en el que la ciudad celebre la Cincomarzada y San Valero. Ambas festividades locales caen en domingo, por lo que se ha alterado el calendario.

Así, la celebración del 5 de marzo se hará el lunes 6 de marzo y la de San Valero, el domingo 29 de enero, se pasará al viernes 13 de octubre. La propuesta fue apoyada por Zaragoza en Común (ZeC), PSOE y CHA.

La concejala de Ciudadanos, Elena Martínez, justificó su voto en contra argumentando que su formación lo ha consultado con el comercio "y dicen que será más beneficioso pasarlo al 30 de enero en lugar de al 13 de octubre". Por su parte, el conservador Sebastián Contín insistió en que un día festivo "cuesta 4.200 millones de euros al país, casi el 0,5% del PIB". El popular se mostró partidario de una racionalización del calendario de festivos "que sea eficaz".