La anunciada ola de frío siberiano llegará hoy a la comunidad y durará unos ocho días, aunque mañana viernes y el sábado "serán críticos, con temperaturas que en Zaragoza alcanzarán los -5°, pero que acompañadas de rachas de viento de hasta 80 kilómetros por hora generarán una sensación térmica de hasta -30° en el centro de la ciudad. Y que a partir de los 1.500 metros podrían ser de hasta -40°", con el consecuente riesgo de congelación.

Así de contundente se mostró ayer el delegado territorial de la Agencia Estatal de Meteorología en Aragón (Aemet), Amadeo Uriel, tras reunirse con el consejero de Política Territorial e Interior del Gobierno de Aragón, Antonio Suárez, para buscar mecanismos que mejoren la colaboración con Protección Civil ante avisos de fenómenos meteorológicos adversos.

Ante esta predicción, el Gobierno aragonés, a través de Protección Civil, ha activado la alerta roja. Y el Ayuntamiento de Zaragoza, el Plan Municipal de Protección Civil para coordinar todos los medios necesarios ante cualquier hipotética situación. Los servicios sociales municipales, en concreto el albergue municipal, así como la Policía Local y Cruz Roja están ya en situación de alerta.

"La situación no es nueva, sino parecida a la que se presentó en el 2005. Por lo que se trata de un tipo de ola de frío que se origina cada siete u ocho años", añadió Amadeo Uriel, quien pidió a los ciudadanos que, a pesar de los frioleros datos, no se alarmen.

POR MUNICIPIOS Algunos de los datos facilitados revelan, por ejemplo, que, entre mañana y el sábado, las temperaturas mínimas en las capitales aragonesas serán de -5° en Zaragoza; -6° en Huesca, y de -9 a -11° en la ciudad de Teruel. Aunque en el Pirineo, como en Jaca o Benasque, serán de hasta -12°, pero habrá zonas con hasta -15°. En cuanto a las máximas, en principio, no se prevén que en Zaragoza superen los 3°. Mientras que en Sos del Rey Católico la máxima será de cero grados. Y en Jaca, permanecerán bajo cero.

Respecto al viento, la media será de unos 30 y 40 kilómetros por hora, aunque habrá rachas de hasta 80 kilómetros. "Un fuerte viento que endurecerá las condiciones", puntualizó Amadeo Uriel. Así, en el caso de las pistas de esquí, como en Cerler, la sensación térmica por el viento será de hasta -40°, por lo que "será complicado disfrutar esta semana del esquí, y habrá que esperar a la próxima". "El domingo mejorará algo la situación, pero el frío no desaparecerá hasta el miércoles o jueves", añadió.

Tanto el consejero Antonio Suárez como el director general de Interior, Javier Artajo, recordaron las medidas básicas de autoprotección y se ha activado el Plan de Vialidad de la DGA.