El turismo y la sostenibilidad son algunos de los ejes estratégicos por los que destaca Zaragoza y su entorno, mientras que se mantiene a la cola en innovación, con índices más bajos que en España y que en el resto de Europa.

Estos son algunos de los datos que ha arrojado el informe del Observatorio Urbano de Zaragoza y su entorno de Ebrópolis, que tiene como objetivo medir y evaluar el avance en cuestiones estratégicas de la capital y sus municipios cercanos.

El estudio de estos datos del año 2016 ha sido presentado hoy en una rueda de prensa en Zaragoza por la consejera municipal de Participación, Transparencia y Gobierno Abierto, Elena Giner, y por la técnico de Ebrópolis Laura Fuertes.

"A nivel de Aragón y Zaragoza hay grandes retos que seguimos teniendo, como en educación e innovación", ha valorado la consejera, quien ha manifestado que el estudio indica que en 2016 "no se termina de despegar" en indicadores estratégicos, pero que un adelanto de los datos del 2017 indica "que cambia la tendencia".

Tras el análisis de cerca de un centenar de datos, el estudio concluye que la capital aragonesa se ha estancado en el año 2016, ha experimentado un retroceso en algunas cuestiones estratégicas y ha profundizado en la pérdida de una posición ventajosa con respecto a la media española, alejándose de la europea.

Educación o atención a la dependencia son dos de las grandes áreas en las que ha empeorado la posición relativa de Aragón, aunque como en otras variables, los primeros indicadores adelantados de 2017 parecen apuntar a un cambio en esta trayectoria negativa.

Es el caso también del desempleo juvenil, el femenino y el de larga duración, unos de los colectivos más castigados durante el 2016 y para los cuales también se esperan mejoras en los indicadores del 2017.

Otro de los aspectos marcados en rojo es "un importante aumento de la desigualdad", consecuencia de "la crisis y los periodos de falta de inversión en políticas sociales".

En este sentido, el estudio de Ebrópolis constata "una irregular distribución territorial con zonas muy empobrecidas y una tendencia a un mayor incremento en los subdistritos que mejor renta poseen, con lo que aumenta la brecha entre territorios".

Entre los aspectos positivos, la técnico ha destacado que la tasa de actividad está mejor en Aragón que en el resto de España y que Zaragoza y su entorno destacan en educación superior y en el rendimiento de los alumnos, según el informe PISA.

Zaragoza sobresale también por su modelo de ciudad, con un porcentaje bajo de superficie artificial y una buena ratio de zona verde por habitante.

En el área de sostenibilidad se resaltan los buenos resultados en consumo de agua y las emisiones de CO2 por debajo de la media, aunque se alerta de la necesidad de afrontar retos en la mejora de la recogida selectiva de residuos urbanos, el consumo de energía por habitante (considerado elevado en 2016), la energía renovable y la calidad del aire.

En cuanto a movilidad, el estudio valora el desarrollo de la red de "carril-bici" pero propone avanzar en la intermodalidad y articulación de tranvía-autobús, el desarrollo de otra línea de tranvía, así como la potenciación de la bicicleta y los trayectos a pie.

El informe del Observatorio Urbano de Zaragoza y su entorno, que se realiza desde el 2006, va acompañado por primera vez de un nuevo estudio estadístico, Zaragoza en datos, y ambos documentos ya pueden ser consultados en la página web de Ebrópolis.