El responsable de Economía y Hacienda municipal, Fernando Gimeno, ya anunció su intención de aplicar medidas de recorte encaminadas a reducir el gasto en servicios externalizados que ahora empezarán a prestar con personal propio. Y entre ellos está el de seguridad en los museos de la ciudad, en el que se podrían ahorrar hasta 1,4 millones de euros. Solo tiene una dificultad añadida: el coste que al que se expone el consistorio con las indemnizaciones. Por esa razón, ahora se prevé que el ahorro al final se quede en unos 500.000 euros.

La medida, que podría aplicarse de forma inminente afectaría, según informaron fuentes municipales, a "unos 60 puestos de trabajo", que son los empleados que aportan las dos empresas que tiene el ayuntamiento contratadas. Son dos distintas, una encargada de la vigilancia y otra de servicios auxiliares como la atención telefónica, la venta de entradas o el control de las propias salas de exposición. Todos ellos trabajan en un total de cinco centros municipales.