La Comisión de Servicios Públicos y Personal del Ayuntamiento de Zaragoza debatirá y aprobará el próximo lunes, 22 de enero, el texto de la nueva ordenanza de Protección Animal, que prevé incluir la obligatoriedad de la identificación por ADN de todos los perros de la ciudad para luchar contra el abandono.

El Centro de Protección Animal de Zaragoza recoge más de 700 perros abandonados al año, de los que el 10 por ciento son camadas, ha indicado el consejero Alberto Cubero en rueda de prensa, por lo que esta medida permitiría localizar a las personas que abandonan a sus mascotas, incluso si les arrancan el chip identificativo.

Esta identificación se hará desde lo público, al contrario que en otras ciudades, y se desarrollará a través de la colaboración con el Colegio de Veterinarios, que extraerán sangre del animal a la vez que le vacunen, la Universidad de Zaragoza, que analizará las muestras, y el Gobierno de Aragón, que incluirá estos datos en el registro autonómico.

Cubero ha destacado que la nueva ordenanza también prevé la prohibición definitiva de los circos con animales y que el objetivo es que Zaragoza siga siendo referente en políticas animalistas y consolide los cambios realizados en los últimos dos años y medio y avanzar así en la defensa de los derechos de los animales.

La propuesta de ordenanza del Gobierno también pretende avanzar en la convivencia con los animales eliminando el azufre de las esquinas, que es tóxico para los perros e, incluso, también para los bebés.

En la misma línea, ha considerado que la regulación de la suelta de animales en los parques ha sido "muy beneficiosa" y, por ello, se volverán a regular los horarios para darles más amplitud y adecuarlos a las horas de sol, retrasando el inicio en verano y adelantándolo en invierno.

Se introduce también que los animales "sean considerados como seres vivos" en casos de catástrofes y riadas y que los bomberos o las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad puedan hacer operaciones de rescate.

No obstante, en un debate en el que ha resaltado que no ha habido "colores políticos", ha señalado que se han registrado hasta 40 votos particulares y aportaciones de los grupos municipales, que se debatirán el próximo lunes, y que gran parte de ellos serán incluidos y, en ese sentido, espera que la nueva ordenanza se apruebe por unanimidad, como ocurrió con la anterior.

Sobre algunos de los debates abiertos, como la posibilidad de que personas y animales compartan espacio en el transporte público, en la que todos los grupos están de acuerdo, ha apuntado que la cuestión es si es viable a nivel técnico o contradice la normativa autonómica en el caso del autobús urbano.

Para las pruebas de ADN, que de momento se plantean solo en perros, se dará un año de plazo para el registro de las mascotas y será entonces cuando se concreten las medidas o las sanciones, que en esta ordenanza no se han modificado más allá de tipificar nuevos hechos.

Además, Cubero ha indicado que los registros de ADN facilitarían medidas como las sanciones a los dueños que no recogieran los excrementos de sus perros de la vía pública, por ejemplo, pero que para ello habrá que esperar un año más.