La Sociedad Municipal Zaragoza Vivienda (SMZV) ha propuesto la venta de dos parcelas para obtener fondos con los que rehabilitar uno de los edificios del antiguo cuartel de Pontoneros como residencia universitaria u otros posibles usos, proyecto presupuestado en 6 millones de euros.
El motivo es que se ha quedado desierto el concurso para contratar la concesión de obra pública para la redacción de proyecto, ejecución de las obras y explotación de los inmuebles municipales de ese espacio, ubicado en la calle Madre Rafols.
El cuartel de Pontoneros y sus antiguas viviendas se iban a destinar a residencia comunitaria, usos universitarios, culturales, locales y estacionamientos.
En la reunión de la sociedad de hoy su presidente, Jerónimo Blasco, ha planteado la opción de la venta de los solares, por los que se obtendrían 3,1 millones de euros, y financiar los otros tres millones a 25 años con el fin de poder acometer el proyecto.
Blasco ha explicado a los medios que sería una decisión que tomaría la siguiente Corporación, aunque de momento IU se opone a la venta de las parcelas, para las que ya hay compradores interesados.
Uno de los solares, con capacidad para 17 viviendas, está ubicado en la calle Torrecilla junto a la antigua Azucarera y está presupuestado en 500.000 euros, y el otro, para 77 pisos, se ubica junto a la antigua fábrica Schindler, y saldría a la venta por 2,5 millones.
El proyecto planteado por la sociedad propone asimismo ampliar el destino de los servicios de la residencia, que se abrirían a cualquier uso permitido por el planeamiento urbanístico, sin que fuera obligatorio destinarlo a residencia universitaria.
En la reunión de la sociedad también se ha aprobado sacar a licitación los pliegos para construir viviendas tuteladas en una parcela de propiedad municipal de la calle María de Aragón en el barrio de Las Fuentes.
Según Blasco esta parcela formaba parte de un convenio con el Gobierno de Aragón que no ha salido adelante y en el que cabía la posibilidad de construir 80 pisos tutelados.
Ahora se plantea proponer la participación de entidades privadas a las que se le cedería el uso del solar por 75 años y un pago de 2,8 millones de euros para que opten por la construcción de viviendas y residencia o solo pisos.
Para Jerónimo Blasco se trata de un proyecto "perfecto" porque además de que permitiría a la sociedad obtener financiación contempla la reversión del suelo a los 75 años.
