Eel Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) anunció que no cesará en su intento de municipalizar los servicios públicos a pesar de la falta de apoyos, y así está siendo. El último movimiento que han dado desde Servicios Públicos ha sido el encargo de un estudio técnico sobre la conservación y limpieza de las zonas verdes y el arbolado de la ciudad que optimice los recursos. El objetivo pasa por demostrar que se puede prestar de un modo que resulte más barato para las arcas municipales y, sobre todo, de una manera más eficaz.

El concejal de Servicios Públicos, Alberto Cubero, explicó que se trata del «primer paso» para comenzar el proceso de internalización del mantenimiento de los parques y jardines de la ciudad, del que ahora se encarga FCC, previo a los informes jurídicos y económicos.

El contrato con Parques y Jardines caduca el 31 de diciembre del 2017, por lo que, aseguró, «hay tiempo para negociar con el resto de formaciones y llevar a cabo el proceso de forma pausada y sosegada».

El concejal admitió que sumar apoyos no va a ser una tarea fácil, después de no haber obtenido los apoyos mínimos en el pleno para iniciar el proceso de reconversión de la depuradora de Zaragoza. Por ello, y para que el estudio no será en vano, adelantó que el estudio también servirá de base para la redacción de los nuevos pliegos de condiciones.

Cubero aseguró que el servicio se puede prestar «mejor y de forma más barata». El proyecto ha salido a licitación por un coste de 21.780 euros (IVA incluido) y analizará la organización administrativa y técnica de los medios asignados para la conservación y el mantenimiento de las zonas verdes y el arbolado. Se realizará un diagnóstico general del estado actual, detectando sus carencias y las contradicciones en las tareas asignadas.

El estudio debe contemplar tres programas de gestión: uno sobre el mantenimiento y limpieza del arbolado, otro relacionado con el césped y uno último que hace referencia a los equipamientos y las zonas infantiles.

El adjudicatario tendrá que cumplir varias prescripciones técnicas para llevar a un «estado óptimo» las zonas verdes bajo criterios ambientales, sociales y sostenibles encaminados a minimizar el consumo de recursos como el agua y los inputs necesarios para el trabajo diario.