El CAI Zaragoza se mantiene a la expectativa de lo que pueda suceder próximamente con el canon de acceso a la ACB por si la decisión final resultara perjudicial o agraviante para los intereses del club, que el pasado mes de septiembre abonó los 360.000 euros de la opción de compra de la plaza después de siete años de pago mediante arrendamiento financiero. El club es prudente pero tiene claro que defenderá sus derechos hasta donde sea posible. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) se ha pronunciado recientemente contraria tanto a ese canon como al fondo de ascensos y descensos y todo parece indicar que la ACB tendrá que modificar ambos requisitos actuales.

El presidente del Palencia Quesos Cerrato, campeón de la LEB Oro y, por tanto, con derecho deportivo al ascenso, indicó ayer en el Diario Palentino que la ACB está negociando un acuerdo de mínimos con la CNMC para establecer un nuevo marco de ascensos y descensos. En caso de no modificarlos, la ACB se expone incluso a una multa. La modificación de ambos requisitos supondría un agravio para clubs como el CAI Zaragoza, uno de los últimos en abonar íntegramente ese canon. El último en hacerlo, el Morabanc Andorra, ya ha anunciado esta semana que, en caso de confirmarse, harán una reclamación a la ACB.

El CAI Zaragoza ha tenido que desembolsar desde su ascenso a la máxima categoría tanto los 2.729.340,46 euros del valor inicial del canon --a los que hay que añadir tanto los intereses del arrendamiento financiero como los 360.000 euros de la opción de compra-- como los 1.432.903,80 euros correspondiente al fondo de ascensos y descensos. Esta cantidad tuvo que abonarla en la temporada 2008-09, tras su último ascenso, mientras que la amortización de la plaza la ha ido pagando en los siete años que lleva compitiendo en la ACB. El pasado mes de septiembre tuvo que abonar los 360.000 euros de la opción de compra, por lo que en la actualidad la plaza ACB es de su propiedad y uno de los principales activos del club. Estos dos aspectos son dos de los requisitos más importantes que la ACB exige para el ingreso en la misma, pero no son los únicos. También se incluyen, entre otros, contar con un pabellón de, al menos, 5.000 localidades, y superar una auditoría de las cuentas.

Unas condiciones que han hecho que de los últimos diez ascensos deportivos a la ACB solo se hayan consumado tres. Uno de los que no pudo lograrlo, el Club Deportivo Tizona de Burgos, interpuso una denuncia en diciembre del 2014 y Competencia ha resuelto que ese canon "obstaculiza de forma injustificada el acceso a la Liga, generando discriminaciones económicas entre unos miembros y otros". Por eso la ACB busca un acuerdo con la CNMC, ya que el cambio parece inevitable.