Pareció un mensaje único, como si el vestuario hubiese pactado alejarse de la presión desde el primer día, para no crear algunas de esas expectativas que tantas veces en tantas partes se convierten en fracaso. Casi nadie quiso especificar los pasos que quiere dar el CAI Zaragoza a lo largo de la temporada, aunque son bien sabidos los gustos marcados, los retos invariables de las últimas temporadas: la clasificación para la fase final de la Copa del Rey, superar las primeras fases de la Eurocup y entrar en los playoffs. A partir de ahí, claro, es cuestión de soñar. Dijo no hace muchos días Henk Norel, capitán al mando tras la salida de Pedro Llompart, que algún día tocará la campanada. Ayer se matizó. "Los objetivos son los mismos que todos los años en el CAI, pero el objetivo para empezar es ganar el primer partido. ", manifestó el holandés sin nombrar las competiciones: "Me gustaría hacerlo mejor que la temporada pasada", zanjó.

En términos similares llegó la cascada de declaraciones del Media Day en el Príncipe Felipe --o José Luis Abós, o como se llame--, la jornada instaurada por la ACB en la que se abren las puertas a la prensa. Uno de los nuevos, Tomás Bellas, siguió la línea del capitán, con verbo fácil y las ideas claras. "Todo el mundo sabe los objetivos que tenemos y mencionarlos no nos va a ayudar. Ponernos presión añadida no es bueno. Vamos a ir partido a partido y marcando pequeños objetivos en lugar de hablar de la Copa o de pasar a la siguiente ronda europea. Sí tenemos como objetivo hacernos fuertes en casa. Creo que si nosotros jugamos nuestro mejor baloncesto va a haber pocos equipos que nos puedan ganar".

Joan Sastre, que ya sabe cómo funciona el asunto por Zaragoza, tampoco quiso mencionar los retos. "Hay que ponerse los mismos objetivos, pero sin obsesionarse mucho. No hay que pensar ahora en la Copa o en la Eurocup, solo en el Barcelona. Luego ya iremos viendo", dijo el alero, consciente de que esta temporada ha crecido la competencia en su posición. "Nunca hay que conformarse, mi objetivo es mejorar lo del año pasado. Esta temporada va a haber más competencia, pero eso siempre es un aliciente para trabajar más y ganarte los minutos".

Precisamente ese aumento numérico afecta directamente a Pere Tomás, que pasa a ocupar un papel poco importante. "Sé desde el principio que va estar muy caro jugar. Hablaron conmigo, me lo dijeron y sé lo que hay. Pero yo tengo mucha ilusión, confío mucho en mí y voy a trabajar cada entrenamiento muchísimo para cuando me necesiten", explicó el balear, que confía en el equipo pese a sus ausencias. "Lo mejor es el ritmo que estamos poniendo ya, aunque hay que mejorar momentos en ataque, cuando pasamos muchos minutos sin anotar. El equipo también es muy nuevo".

SIN PROMESAS

Isaac Fotu es una de las caras nuevas pese a que fue contratado hace casi un año. Pasó buena parte del curso cedido en el Manresa, donde empezó a conocer la ACB. "Ya sé desde la pasada temporada que el CAI es un muy buen equipo y un buen club al que le gusta hacer las cosas bien. Espero que sea así, acabemos arriba en la Liga y estemos muy fuertes en la Eurocup".

Por último, Stevan Jelovac se salió del guion lo justo. "Yo creo que podremos llegar a los playoffs, pero no prometo nada. Vamos a trabajar para intentarlo, tenemos un equipo con gran talento", dijo el serbio antes de rematar la mañana con un mensaje del capitán Norel: "Ahora estamos trabajando para jugar más duro, más intenso, para transmitir a los nuevos que no es una Liga cualquiera, que un día puedes ganar al Madrid y al siguiente pierdes contra el Manresa. Todos saben que es una Liga dura y creo que tenemos mucho margen para crecer".