El caso Neymar avanza hacia el desenlace y las emociones se disparan. El protagonista del serial parece haber sucumbido a los nervios por la necesidad de tomar una decisión crucial en su carrera, y una trifulca con Nelson Semedo lo confirmaría. Mientras el futbolista calla, su padre anda a la expectativa de lo que discutan el Barça y el PSG en la negociación, tasada sobre la base de los 222 millones de la cláusula de rescisión. Neymar espera acontecimientos. Los esperará hasta el lunes y la razón de su silencio podría radicar en un bonus de 25 millones que pactó cuando firmó su renovación, en octubre pasado, y que tiene pendiente de cobro del Barça. La cantidad debe hacerse efectiva antes del 31 de julio. El club azulgrana interpreta que el jugador dilata su decisión para percibir los 25 millones y marcharse al PSG.

El caso presenta flecos económicos. Si los Neymar siguen el procedimiento de pagar la cláusula, Hacienda reclamaría el pago del IRPF, con lo que la cantidad rondaría los 300 millones. Si se pacta un traspaso de 222 millones, no habría un sobrecoste adicional para el PSG. El club azulgrana, por tanto, podría negociar un precio más alto para que la otra parte se ahorre parte del IRPF. Un elemento clarificador llegó desde la otra parte del mundo. Desde Shanghai, donde esperaban a Neymar para una serie de actos promocionales. CTrip, la agencia de viajes online más grande del país, canceló un encuentro el mismo lunes entre el futbolista y aficionados, que habían pagado 25 euros por verle y expuso que «Neymar y su equipo estaban ocupados arreglando temas de un traspaso» y no podían asegurar que acudiera. La empresa garantizó la devolución de las entradas y el pago de indemnizaciones. El Barça negó esta cancelación y señaló que «Neymar no se había comprometido a asistir a otro acto que no fuera el que el club tiene programado con la marca de ropa Replay».

Tal vez sea el haber llegado a la situación incontrolable de depender de terceros lo que ha excitado los ánimos de Neymar, impecable hasta ahora en el césped. Tres goles en dos partidos (los tres del Barça, dos a la Juventus y uno al Manchester) reforzaban la entereza psicológica del jugador. Pero la tensión se escapó en el momento menos esperado.

PIQUE CON SEMEDO

En un lance del entrenamiento del Barça en la Universidad de Barry. En una jugada aparentemente inocua, con Semedo acosando a Neymar tratándole de quitar el balón sin patadas ni golpes. El pobre Semedo, recién llegado al equipo, se alejó del lugar pero Neymar siguió pidiéndole explicaciones. Busquets trató de contener al delantero y Mascherano le dio una palmada cuando se quitaba el peto y se marchaba.

Las imágenes fueron publicadas por el Daily Mail. Pertenecen a un entrenamiento a puerta cerrada. El club desalojó a los periodistas tras el primer cuarto de hora, pero los aficionados pudieron seguir la sesión a través de las vallas. Lo que las imágenes no desvelan es si Neymar se va del campo por su propia voluntad o despedido por Ernesto Valverde. Se marchó enfadado, hasta que se disipó el calentón en la ducha. La situación empieza a ser insostenible por la indefinición. El Barcelona no sabe si va a perder al jugador, el PSG no sabe si lo va a tener y los Neymar no se han decidido.