Agapito Iglesias sigue sin plantearse la opción de abandonar el Real Zaragoza. El presidente y accionista mayoritario de la entidad zaragocista quiso mostrar ayer su "respeto" por la masiva concentración realizada el pasado sábado por la afición zaragocista en su contra antes del partido frente el Getafe, que incluso califica de "legítima", pero en el comunicado emitido por el club a través de su página web en ningún momento menciona la posibilidad de irse del Zaragoza o de ceder la gestión del mismo, que es lo que le pidió mayoritariamente la gente.

En la concentración organizada por la plataforma Salvemos el Real Zaragoza en la plaza de La Romareda participaron más de 15.000 personas y el mensaje más repetido fue el de Zaragoza sí, Agapito no. Luego, dentro del estadio, en el minuto 32 del partido, los 28.000 aficionados que acudieron al campo municipal secundaron la agapitada que estaba programada en contra del empresario soriano. Agapito no acude al palco de La Romareda desde el partido de vuelta de la Copa del Rey contra el Alcorcón obligado por la fuerte contestación que estaba teniendo desde la grada.

En un acto de evidente cinismo, Agapito Iglesias vuelve a insistir una vez más en que con la unión de todo el zaragocismo se podrá conseguir que el equipo permanezca otra temporada más en Primera División. Agapito agradece en el comunicado el comportamiento de la afición el pasado sábado "por su apoyo" a los jugadores durante el encuentro disputado ante el Getafe y añade: "Con la unión entre todos los sectores del zaragocismo, como se ha demostrado en los últimos años, será posible conseguir el objetivo de permanecer en la máxima categoría".

EVITAR EL DESCENSO El empresario soriano recuerda que el objetivo del Real Zaragoza es evitar el "descenso" y asegura que "por ello se va a hacer un importante esfuerzo para reforzar al equipo, como ya ha ocurrido en otras ocasiones, recurriendo al mercado de invierno e incorporando a jugadores que puedan aportar compromiso, experiencia e ilusión, siempre dentro de lo establecido en el presupuesto económico con el que se inicio el proceso del concurso de acreedores y con la supervisión de los administradores judiciales, piezas fundamentales para que se siga con rigor dicho convenio y presupuesto".

En el comunicado también se señala que la supervivencia y la viabilidad del club están "más que garantizadas", incluso si produjera un hipotético descenso a Segunda División. "Por ello, se descarta totalmente cualquier especulación sobre la posible desaparición o liquidación de la entidad. Cualquier información en ese sentido podría calificarse como totalmente errónea". El club se encuentra ahora pendiente de que la jueza que controla el concurso voluntario de acreedores apruebe la Propuesta Anticipada de Convenio (PAC) para culminar dicho proceso.

El Real Zaragoza indica también que para conseguir el acuerdo con los acreedores mantuvo contactos con la Liga de Fútbol Profesional, "que es conocedora de todo el proceso y que no le pide ninguna otra contraprestación o requisito adicional, al margen de lo estipulado en el propio convenio". La LFP aceptó firmar ese convenio y eso permitió en buena parte que la PAC pudiera salir adelante. Desde la entidad zaragocista, no obstante, se reconoce que "todas las acciones futuras en el apartado económico tienen que dirigirse indudablemente a cumplir escrupulosamente dicho convenio".