Fernando Alonso ha renunciado al Gran Premio de Mónaco, una de las carreras más emblemáticas del Mundial de Fórmula 1, para disputar por primera vez en su carrera profesional las 500 Millas de Indianápolis. La sorprendente noticia fue oficializada el miércoles por Mclaren, que en un comunicado describió los detalles de la decisión de Alonso.

El coche estará gestionado por el equipo Andretti Autosport encabezado por su fundador, propietario y CEO, Michael Andretti. El excampeón de la IndyCar corrió en la Fórmula 1 para McLaren junto al legendario Ayrton Senna durante una temporada (1993) y es el hijo del tres veces campeón de la IndyCar y una vez campeón de la Fórmula 1, Mario Andretti.

«Dado que las 500 Millas de Indianápolis se disputarán el próximo 28 de mayo (el mismo día en que se celebra el Gran Premio de Mónaco), Fernando no tomará la salida en la carrera monegasca de este año. Sin embargo, las 500 Millas de Indianápolis será la única carrera de la IndyCar del 2017 en la que Fernando competirá, por lo que el Gran Premio de Mónaco será la única prueba de 2017 en la que se ausentará el español. McLaren-Honda anunciará a su debido tiempo el nombre del piloto que ocupará el lugar de Fernando Alonso en Mónaco», concluye el comunicado, aunque los primeros indicios apuntan al regreso de Jenson Button para el gran premio monegasco.

«ESTOY EMOCIONADO»

Por primera vez en 16 años, Alonso no correrá por las calles del principado. El piloto de F-1 y su escudería McLaren priorizan su participación en la carrera americana. «Estoy emocionado. Las 500 Millas de Indianápolis es una de las carreras más famosas del calendario, rivalizando con las 24 Horas de Le Mans y Mónaco», declaró el piloto asturiano.

Alonso no será el primero en probar en ambas disciplinas. Otros ilustres pilotos fueron Alberto Ascari, Brabham, Jackie Steward, Fittipaldi, Mansell, Nelson Piquet o Juan Pablo Montoya, quien sigue disputando la Indycar tras dejar la F-1.