El entrenador de la Sociedad Deportiva Huesca, Juan Antonio Anquela, mostró su indignación por las sanciones de Melero y Aguilera, que son baja el próximo lunes ante el Rayo Vallecano y a los que los comités no han retirado la amarilla en un recurso que, en el caso sobre todo de Aguilera, el entrenador considera más que justificado para que hubiera podido jugar un duelo clave para entrar en el playoff.

«Siento impotencia y me parece injusto porque es una jugada en la que Aguilera toca el balón. Ahora tenemos dos jugadores menos que venían haciendo un trabajo excepcional y esperemos que el que tenga que entrar lo haga bien y en la línea que el equipo lo venía haciendo últimamente», apuntó.

Anquela tendrá que cambiar el eje de la medular pero confía en que quien salga lo haga bien porque cree que todos están preparados. David López y Sastre, en principio, parecen los elegidos para volver, ya que Bambock lleva mucho tiempo sin jugar. «Veo a todos que trabajan bien para cuando llegue el momento y tan importante es jugar todos los partidos como ochenta minutos o solo diez. Ahora el equipo los necesita y estoy convencido de que los que salgan lo harán bien».

Anquela cree que el Rayo está hecho «para subir a Primera», porque cuenta con la inmensa mayoría de jugadores que militaban en dicha categoría. Así, quiere mentalizar a la afición azulgrana de lo complicado que será este encuentro por el potencial del conjunto madrileño. «Que todo el mundo se conciencie y que sepamos contra quién jugamos. El Rayo Vallecano estaba en Primera División el año pasado, está en el mejor momento y jugando a su nivel. Es un equipo muy peligroso que tiene delanteros que hacían goles en Primera y que son capaces de decidir en una jugada», advirtió.

Igualmente, el entrenador del Huesca avisó de que «ahora viene lo más difícil y la hora de la verdad. Quedan muchos puntos, 21, y eso es un mundo. Pueden venir equipos de atrás y nada hay definitivo», explicó el preparador del conjunto oscense.

VISITA A LOARRE / Dado que el partido no es hasta el lunes, Anquela organizó ayer una actividad física diferente, ya que el Huesca disfrutó de una jornada con la visita a la Colegiata de Bolea y un largo paseo por el Castillo de Loarre con posterior comida en la zona para hacer grupo.